«La pareja ideal», es un sueño que en ocasiones nosotros pretendemos cumplir, pero podemos empezar esta nota desmintiéndolo y encontrando palabras más cercanas a lo que realmente pasa en nuestras vidas y lo que sí nos ayudaría a ser amadas.
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Antes de continuar queremos recordarte que el amor y el enamoramiento son cosas distintas, cuando estamos enamoradas hay adrenalina, deseo, entusiasmo e intensidad, en cambio el amor es profundidad, constancia, voluntad y pasión.
Empecemos con «Aprender a distinguir» a la persona
Primero, empieza por preguntarte:
¿Qué tienes tú para ofrecer en una relación? ¿Quieres tener una relación de pareja? ¿Para qué quieres tener una pareja? ¿Qué quieres tener en una relación? ¿Qué es lo que no deseas vivir al lado de una pareja?
Es decir, logra tener claridad en tus expectativas, sé abierta contigo y reconoce lo que deseas vivir, quizá sigues tentada a una vida en pareja porque eso es lo que te dicen todos que es lo que se «debe de hacer», pero quizá tú no, quizá tú eres de las mujeres completas que son felices solas.
Quizá la persona ideal para ti, eres tú misma. Es tu tiempo, energía, emociones, dinero y todo lo que tú eres, por y para ti, y, ¿sabes qué? Eso está bien.
Defiéndelo y ámalo y sigue viviendo la vida que te hace feliz.
Pero, si sí quieres unir tu vida a la de alguien más, entonces empieza por aceptar que NO llegará una persona perfecta, con los defectos que toleras más fácil, ni con las virtudes que tú deseas.
Llegará alguien con un pasado, con hábitos, con manías, con recuerdos y modos que quizá no te convenzan del todo, pero estará en ti decidir si lo aceptas o no.
Así que desde el inicio no será fácil, pero tampoco tiene que ser tan difícil como para tirar la toalla cada que el panorama se complique.
Eso no significa que debes conformarte, sino que debes ser honesta y valiente para decir NO cuando no estés convencida.
Así que debes estar abierta a conocer a otro con toda la espontaneidad y naturalidad de su ser, sólo se ama lo que se conoce.
Si, al tratar a alguien aún decides que deseas seguir a su lado, entonces «Tu pareja ideal» deja de existir en sí, y se trata de construir la «relación que ambos necesiten y que a ambos los haga feliz».
«Tu pareja ideal» no existe.
Sólo existirá una persona con tus mismas ganas para hacer las cosas bien, una persona dispuesta igual que tú a construir una relación para los 2.
Entonces, debes saber que cuando llegue alguien interesado en ti, será tu decisión tomar el mismo barco de alguien con defectos, manías y errores, si a pesar de lo negativo, te llena de más satisfacciones y plenitud, es un buen comienzo.
Si te da paz, amor, cariño, atención, estabilidad y ganas de compartirle cómo te fue en el día, parece que de tu lado ya tienes una buena relación, lo mismo debes ofrecer.
El amor debe fluir gracias a la voluntad de AMBOS y no siempre se trata de dar un 50-50, a veces uno da el 70 y el otro el 30, pero los dos deberán esforzarse para mantener el 100.
