El otro día en Tiktok me encontré con una reflexión que me dejó helada, porque hablaba de aferrarte a lo que ya no es para ti.
Es decir, una chica contaba la historia de su vestido favorito, era el ideal, porque le llegaba abajo de la rodilla, era fresco, con holanes y hasta bolsas.
Es decir, ese vestido lo tenía todo, sin embargo, ya no le quedaba. Ya no era de su talla ni tampoco de su estilo, sin embargo, no quería deshacerse de él.
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Ya no lo usaba ni tampoco lo dejaba ir, solo ocupaba un espacio en su clóset. Ella tenía claro que antes le encantaba, pero ahora ya no sentía mucho por ese vestido, solo lo veía como una parte importante de su vida.
Un día intentó hacerle reparaciones al vestido, pero no funcionó, seguía sin quedarle, incluso, dejó de gustarle por completo, pero no lo tiró, solo se conformó con tenerlo ahí y recordar los buenos momentos juntos.
Sin embargo, un día se dio cuenta de que ese vestido y ella no estaban destinados, y que sí tenía que valorar lo feliz que la hizo, pero tenía que dejarlo ir.
Porque tenía que probar otros vestidos, incluso otro tipo de prendas, que no tenía que aferrarse a algo que ya no era de su talla o que la hacía infeliz…
Así dejarás de aferrarte a un hombre que ya no es para ti
Tal vez, en este punto creas que seguimos hablando de un vestido, pero no es así, esta chica usaba una metáfora para referirse a una relación anterior.
Ese vestido en realidad era un hombre al que había amado durante mucho tiempo y al que se aferró a creer que era el indicado.
Sobre todo, porque estuvieron mucho tiempo juntos y al principio parecía un príncipe azul, sacado de un cuento de hadas.
Lo tenían todo, parecían estar destinados a ser una pareja consolidada y a tener una familia, pero con el tiempo, ambos crecieron y maduraron, por lo que esa relación ya no era de su talla.
Incluso, se dieron cuenta de que querían cosas diferentes y que solo estaban forzando las cosas, sin embargo, decidieron quedarse juntos e intentarlo una vez.
Forzaron las cosas tanto que el amor se rompió y ya ni siquiera quedaban los buenos momentos, solo la nostalgia de lo que ya no fue.
Por esto, esta chica recomendaba no aferrarte a lo que ya no es para ti, a lo que ya no compagina contigo y a lo que ya no te queda.
Porque aferrarte a entrar en algo pequeño o que es menos de lo que tú quieres, no te hará feliz, solo te causará mucho daño.
No debes conformarte ni tampoco obligarte a quedarte con algo que no te hace completamente feliz, porque nunca será adecuado para ti y siempre estarás luchando para que funcione, cuando claramente, no está destinado para ti.
Ya no están hechos para estar juntos
Del mismo modo, que esa chica se aferró a su “vestido”, pasamos por situaciones similares con personas que ya no son para nosotras.
Sabemos perfectamente que ya no entran en nuestra vida, que no son compatibles y que solo estarán ahí, ocupando espacio, pero no nos hacen ningún bien.
Porque tenemos el recuerdo de que lo disfrutamos en el momento y nos quedamos con eso, sin embargo, debemos tener presente que no será lo mismo, ya que, no lo vamos a disfrutar de la misma manera, porque ahora eres otra persona.
Aferrarte a un amor, solo por el recuerdo o porque lleva años acompañándote, no significa que serás feliz o que las cosas volverán a ser como antes.
Si no que todo el tiempo forzarás las cosas para entrar nuevamente y esto significa que te vas a “moldear” por un amor que no es para ti y que ya no te queda.
Incluso, tú serás la única que haga de todo para salvar ese amor, mientras ese hombre solo te exige y no te da lo mínimo.
Por esto, no debes aferrarte a un vestido ni a un hombre que ya no es para ti. Si no que debes aceptar que fue bueno en su momento, pero debes dar la vuelta a la página, para seguir escribiendo una nueva y mejor historia.
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