Lo mejor que puedes hacer por el mundo es hacerte feliz…
Estamos iniciando días cada vez más complicados, la televisión, la radio, los periódicos y las redes sociales nos exponen noticias complejas, delicadas y de peso.
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Por esto, es tan importante estar en paz con uno mismo y encontrar felicidad en pequeños placeres de la vida, quizá en momentos cortos de nuestros días, pero que nos dejan la sensación de satisfacción.
Así, lo mejor que puedes hacer por el mundo es hacerte feliz…
Maneja tus emociones
Controlar tus emociones para que éstas no te controlen a ti, de esta manera será más fácil ser una persona amable, con disposición y poder de ayudar a otros.
Una persona ecuánime que no ande creando conflictos sólo por diversión o, peor aún, porque quiera ver arder el mundo entero.
Alguien con disposición de escuchar a otro y darle un consejo o un silencio, según se necesite.
Ejecuta el respeto
Empezando por el propio hasta por aquellas personas con las que tengas ideas contrarias. Serás más paciente y tolerante con tu entorno.
La persona que se respeta y que es capaz de respetar a otro puede llevar paz a donde hay guerra.
Perdona
A veces, para solucionar los rencores más profundos sólo se necesita un perdón, darlo u ofrecerlo.
Las disculpas son una manifestación del respeto y del reconocimiento de que no quisimos lastimar.
Cuida tu salud
Más que lucir de determinada forma para darle gusto a otros o seguir estereotipos, es importante que aprendas a cuidar tu imagen porque es una consecuencia de cuidar tu salud.
Al cuidar tu salud ayudas a otros al evitar enfermarte y ser parte de las estadísticas negativas de salud, además, puedes motivar a otros a hacer lo mismo o a ser conscientes de no dejar pasar desapercibida cualquier molestia.
Inspírate
La felicidad puede llegar de la nada, justo cuando menos estamos aferradas a sentirla, esto tiene que ver con la inspiración.
Ubica tus fuentes de inspiración y déjate ser una para otros… Deja que te admiren con humildad.
No renuncies a tus sueños
Descansa cuando sea necesario, pero jamás renuncies a tus sueños, si tienes claro lo que quieres lograr, deja que la vida te ponga a prueba y supéralo todo o, inténtalo con dignidad.
Quizá, en el camino, mientras te esfuerces por cumplir tus sueños, ayudarás a otros a cumplir los suyos, así que mientras haya un soñador, hay esperanza.
Ante un mundo con guerras, incendios, amenazas, crímenes, injusticias y noticias tristes, haz la diferencia, lo mejor que puedes hacer por él es ser una persona feliz, plena, sin resentimientos…
¡Vive, ama, perdona y sé feliz!
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