Mientras tú aseguras ser una mujer inteligente y madura, estás demostrando lo contrario en tu relación, ya que, eres muy inmadura.
Tanto que te estás comportando como una niña berrinchuda y caprichosa, a la que se le debe dar todo y no necesita hacerse responsable de nada.
Te recomendamos:
Así puedes restaurar tus uñas después de ponerte acrílico
Así sabrás que estás en el lugar correcto
¡Échale un ojo al Facebook de Hey Hey Hello! 😉
Y, tal vez, hasta ahora te has salido con la tuya, porque tu pareja ha aguantado este tipo de comportamientos porque te ama.
Sin embargo, su paciencia y amor están por esfumarse, porque él ha sido muy tolerante y tú cada vez más inmadura.
Por esto, necesitas ver que tu comportamiento no te está ayudando en nada y solo está provocando serios problemas en tu relación, tantos que al final del día te quedarás sola.
Cómo es una mujer inmadura en una relación amorosa
1. Haces berrinche.
En el momento en el que tu pareja pone límites o no te puede brindar lo que le exiges, decides que lograrás ganar si haces un berrinche.
Sin embargo, esto no logra tu cometido, solo provoca que él tenga pena ajena y que tenga claro que eres muy inmadura.
2. No te comprometes.
Quieres los beneficios de una relación amorosa, pero no las responsabilidades, por lo que no quieres comprometerte a largo plazo, ni tampoco aceptas las consecuencias de tus actos dentro de la relación.
Simplemente, quieres obtenerlo todo, pero no estás dispuesta a dar lo mínimo.
3. Eres egoísta.
Otra forma en la que demuestras que eres una niña o que te falta madurez es que solo te centras en tus necesidades y deseos, y nunca consideras a tu pareja.
Incluso, piensas que él debe darte todo y ceder ante tus caprichos y no recibir nada a cambio. Con esta actitud le demuestras que no lo amas y que solo lo usas a tu conveniencia.
4. No te comunicas.
En todo momento presumes de tu inteligencia emocional, de tu empatía y hasta de tu honestidad, pero todo esto se viene abajo, cuando no lo aplicas en tu relación.
Ya que, nunca hablas con tu pareja y cuando lo haces, solo lo haces para hacerlo sentir mal o para mentirle.
Incluso, evitas las conversaciones difíciles y quieres resolver las cosas ignorándolo o asegurando que tú tienes la razón y él debe hacer lo que tú quieres.
5. Eres insegura.
Todo el tiempo estás sintiendo celos, eres posesiva, quieres controlar a tu pareja y tienes la necesidad de que él te alabe en todo momento.
Y estas acciones demuestran que no estás cómoda contigo misma, lo peor de todo es que le exiges a tu pareja que sea perfecta, cuando evidentemente tú no lo eres.
6. Eres irresponsable.
Nunca aceptas tus errores y siempre le echas la culpa a alguien más, no eres capaz de aceptar que no eres perfecta y todo empeora en el momento en el que quieres que tu pareja te salve.
Incluso, muchas veces, lo has usado para librarte de problemas, sin importar que él quede mal ante los demás, por tus tonterías.
7. No eres empática.
Nunca entiendes a tu pareja y tampoco lo apoyas, vas por la relación pensando que tus necesidades son las únicas que cuentan.
Y que él exagera al pedirte lo mínimo, porque tú piensas que ya le das todo, pero solo te estás cegando por el ego y la inmadurez.
Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y TikTok.