¡Adiós, tacones!
Las mujeres amamos los tacones, son nuestra perdición ya que nos ayudan a sentirnos guapísimas cuando usamos nuestros mejores outfits.
Unos buenos tacones nos ayudan a vernos más delgadas, más altas, hacen que nuestros glúteos y piernas se vean más estéticos y firmes. Además de que nos hacen sentir más seguras de nosotras cuando los usamos en una ocasión especial.
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Pero, aunque seas toda una experta, en ocasiones los tacones pueden llegar a lastimarnos, debido al uso excesivo que les damos.
Nuestra salud es primordial y unos tacones solo son un accesorio más, por eso conoce excelentes razones para despedirte de esos tacones que te torturan día a día.
1. Adiós dolor de espalda.
Al llevar tacones por mucho tiempo provocamos una incorrecta postura en nuestro cuerpo. Aunque nuestra silueta se ve estética, existe una fuerte presión en la región lumbar, provocando terribles dolores de espalda
2. No más lesiones.
En muchas ocasiones los tacones pueden provocarnos esguinces, torceduras y hasta lesiones más graves.
También recordemos los juanetes y callos que salen por el roce constante del calzado, además de los pisotones que pueden darnos.
No vivas sufriendo, el dolor no siempre es placentero.
3. Pies sanos y fuertes.
Por fin dejarás que tus pies descansen, la hinchazón provocada por el uso constante de los tacones será cosa del pasado.
Tus tobillos estarán más fuertes, pues con el uso de tacones todo tu peso caía sobre ellos, ahora sin los tacones podrán fortalecer los músculos.
4. No varices.
El usar los tacones constantemente provoca una mala circulación en nuestras piernas por lo tanto aparecen las antiestéticas varices que ninguna quiere, al dejar de usar tacones el flujo sanguíneo podrá circular de forma normal y así evitarás este problema.
5. Cómoda por siempre.
La mayoría de las mujeres al pasar un par de horas con tacones, solemos sentirnos cansadas y hasta con los pies hinchados.
Además de que se nos dificulta caminar en ciertos tipos de pisos, correr y hasta disfrutar de bailar toda la noche. Deja a un lado los tacones y podrás disfrutar más de tus actividades diarias.
Si aún no te decides dejar los tacones por completo puedes iniciar con estas recomendaciones:
*No uses tacones todos los días.
*Cuando empieces a sentirte cansada, ponte unos tenis, más vale sentirte cómoda que seguir sufriendo.
*Usa plantillas para hacerlos más cómodos.
*Dale un masaje por lo menos una vez a la semana a tus pies, ellos te lo agradecerán.
Como te mencionamos antes, unos tacones solo son una parte más de tu atuendo. ¡Tú puedes! Eres esa mujer fuerte, segura y hermosa que siempre has proyectado, aunque no lleves unos tacones puestos.
¡Dile adiós a los tacones! Prefiere sentirte cómoda y segura con las prendas con las que te vistas. Todo es cuestión de la actitud.
