En ocasiones tomamos la decisión de entablar una relación con alguien que no deberíamos, con una persona prohibida, nos arriesgamos y decidimos ser la otra.
Probablemente lo hagamos para experimentar, aventurarnos o simplemente porque nos enamoramos y no sabemos qué hacer.
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Cada una podrá tener sus razones y defenderlas ante los demás y está bien, pero analizando la situación ser la amante no es algo por lo que debas sentirte orgullosa.
Al contrario, la situación podría traerte más lágrimas que risas, por esto, te decimos 10 razones para nunca ser la otra:
1. No hay futuro.
Analízalo bien, en esta situación tienes 2 opciones, la primera es que él no cede a dejar a su pareja así que no llegarán a más, la segunda se va contigo, pero nadie te asegura que él te sea fiel, si ya lo hizo una vez, lo volverá hacer.
2. Es desgastante.
Siempre estarás esperando a que él pueda verte, en que el tiempo que te dedique sea muy limitado y además de que todo es a escondidas, por lo que siempre están alerta de que nadie los vea.
3. Recibes las sobras.
Aunque creas que es al revés, no es así. Ella tiene todo: el nombramiento, la casa, los hijos, una vida con él y tú solo las migajas.
4. Tú eres la mala.
Al final si cuentas tu historia no importa que tú no hayas sido la que provoca todo, los demás pensarán que tú eres la mala de cuento, la que lo incito a él.
5. No hay respeto.
Si no respeta a su familia tampoco lo hará contigo.
6. No te quiere.
Lo suyo no es amor verdadero, si su relación se basa en salir de vez en cuando y terminar en un hotel definitivamente no es amor.
7. Te mientes.
Crees que al salir con alguien comprometido este ya no podrá engañarte ni mentirte, pues así tienes el control de la situación, pero no es así, si él quiere puede conseguir una tercera opción.
8. No eres su novia.
Te engañas a ti misma diciendo que eres su novia, no puedes suavizar lo evidente, en realidad eres la amante, no hay más.
9. Tu autoestima está en los suelos.
Si te tuvieras un poquito de amor propio te darías cuenta de la situación y no la aceptarías, pues mereces algo mejor, algo que sí valga la pena.
10. Habrá consecuencias.
Toda acción tiene consecuencias por lo que tarde o temprano el Karma te pasará la factura y ser la otra te saldrá muy caro.
Es momento de que analices la situación y pienses bien tus actos, recuerda por la única persona que vale la pena luchar eres tú misma, recuerda que hay más peces en el mar y que llegará alguien mejor.
