Hasta hace poco tiempo eran pocas (poquísimas, de hecho) las mujeres que se asumían como feministas. Y es que, desde el surgimiento del feminismo, este movimiento ha estado rodeado de múltiples mitos que hacen que muchas personas tengan un concepto completamente equivocado sobre el mismo.
Y, claro, entre las falsas ideas que la gente ya tiene, los atroces memes sobre las «feminazis» (término, por cierto, con el que dan ganas de hacer eye-roll por siempre) que circulan en las redes sociales y el poco o nulo interés que muestran muchos por saber más sobre el asunto, la tarea se hace más complicada.
En serio, ni siquiera se trata de ser un erudito sobre el tema, pues basta darle una leída rápida a la entrada sobre feminismo en Wikipedia para darte cuenta más o menos de qué va la cosa.
Así que no dejes que te cuenten cuentos chinos y crea tu propia opinión sobre el feminismo, un movimiento que sigue siendo tan necesario en este siglo XXI como en sus inicios y al cual le faltan aún muchas cosas por lograr.
1. El feminismo es lo contrario al machismo.
Increíble, pero cierto: hay todavía MUCHAS personas que creen que el feminismo es malo porque les suena a que es totalmente opuesto al machismo. No, no, no y no. Recordemos que, entre muchas cosas, el feminismo busca la EQUIDAD entre mujeres y hombres.
2. Las feministas quieren que las mujeres sean superiores a los hombres.
Muy en relación con el punto anterior. No, el feminismo no plantea la superioridad de la mujer, ni tampoco significa que las feministas odien a los hombres.
3. Las feministas se sienten víctimas.
A ver, una cosa es que el feminismo busque hacer visible la violencia física, emocional, sexual, laboral, etc. que existe contra las mujeres y otra cosa es victimizarse. Por el contrario, el feminismo busca fortalecer y empoderar a las mujeres para que puedan ser conscientes de las opresiones que viven cotidianamente y así luchar contra ellas.
4. El feminismo no es necesario porque las mujeres ya son iguales a los hombres.
Si bien es cierto que la lucha feminista ha logrado muchos avances en la vida de millones de mujeres en el mundo, aún estamos lejos de alcanzar una verdadera equidad con respecto a los hombres. Y, no, no estamos hablando únicamente de los países en los que las mujeres viven mayor marginación, pues incluso en los países de primer mundo las mujeres
5. Todas las feministas son lesbianas.
Por supuesto que hay feministas lesbianas, pero eso no significa que todas las feministas lo sean. Bienvenida sea la diversidad.
6. Sólo las mujeres pueden ser feministas.
No podemos olvidar que el feminismo es un movimiento creado por y para las mujeres, pero eso no significa que no sea relevante (por no decir básico) que existan aliados al feminismo. Así que, queridos hombres aliados del feminismo, gracias por luchar por nuestra causa desde su trinchera.
7. Las feministas están locas y amargadas.
Por supuesto que a las feministas nos enojan las injusticias cometidas cotidianamente contra las mujeres, pero de ahí que nos quieran tildar de locas, histéricas o «feminazis» (eye-rolling forever) para intentar silenciarnos (porque, en el fondo, eso es lo que se busca) es muy diferente. Y, no, que no nos riamos de los chistes misóginos y machistas no significa que no tengamos un gran sentido del humor.
¿Habías escuchado algunos de estos mitos? ¿Qué otros te han contado?
[Foto: Beatriz Vera / Shutterstock]
