El amor no sólo afecta nuestras rutinas, sino que tiene efectos en nuestro cuerpo que son más que evidentes.
Por ejemplo, es común que mientras estemos enamoradas experimentemos una especie de obsesión por la otra persona; pero esa misma sensación se repite cuando pasamos por la etapa de ruptura.
Es decir, recordamos a esa persona a cada instante y de manera aleatoria, queremos estar a su lado a cada momento (o recuperarlo, si es el caso), entre otras cosas.
Ahora bien, si acabas de ponerle punto final a una relación amorosa, te compartimos algunas sensaciones que experimenta tu cuerpo en esta etapa:
¡Checa y date un poco de tiempo para superarlo!
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1. Cambios en el apetito.
Ya sea que aumentes o bajes de peso. Lo primero sucede porque recurres a la comida para buscar placer y calmar la ansiedad; lo segundo ocurre porque experimentas una falta de motivación y también un aumento de estrés.
2. Estás más sensible.
Las lágrimas salen solas y de manera aleatoria en el trascurso del día.
3. Cumples tu rutina de manera más lenta.
La falta de concentración te lleva a invertir el doble de tiempo en tus actividades diarias.
4. Insomnio.
La falta de sueño, a su vez, te hace más proclive a sufrir depresión y a no rendir lo suficiente al día siguiente.
5. Dolor muscular.
Cuando las personas están deprimidas tienen más riesgo de sufrir lesiones y luego soportar los fuertes dolores que éstas provocan.
6. Puedes sufrir un ataque al corazón.
Después de una ruptura amorosa hay un incremento de adrenalina que altera el funcionamiento normal del corazón.
Cuéntanos ¿qué otras cosas agregarías a esta lista?
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