Cuando éramos chiquitas creíamos que mamá era algún tipo de súper héroe, ¡nunca se quedaba quieta! Siempre estaba ocupada con algo, aguantaba nuestros berrinches, peleas entre hermanos y trataba de estar buen humor con todo y su dolor de cabeza.
Es por ello que mamá logra que lo imposible sea posible haciendo varias actividades al mismo tiempo:
1. Manejar y regañarnos
Era clásico que de pequeñas no nos estuviéramos quietas cuando viajábamos en el coche con mamá. Al final nos regañaba en el camino mientras seguía manejando.
2. Darnos de comer mientras seguía cocinando
Cuando somos chiquitas es muy difícil que obedezcamos al “no te levantas de aquí hasta que termines”. Mamá debía jugar «avioncito» para que comiéramos mientras terminaba de preparar la cena de adultos.
3. Platicar mientras hacía la limpieza
De ellas aprendimos a hablar por teléfono y realizar alguna otra actividad que requiera dedicación al mismo tiempo. Sólo ellas conseguían que la casa brillara mientras hablaba con papá o nosotras.
4. Hacer el súper y cuidarnos
Ir revisando la lista de cosas por comprar y meterlas al carrito mientras nos hacía reír en la periquera del carrito.
5. Peinarnos y buscar una liga o pasadores
Cuando acaban de peinarnos con una coleta, trenzas y se les olvidaba donde dejaron las ligas del cabello o no encontraban los pasadores. Eso sí, no nos soltaban para no tener que volver a empezar.
6. Lograr que nos quedáramos quietas en el baño
Cuando nos gustaba jugar en la regadera como si fuera chapoteadero mientras no nos dejábamos poner shampoo o jabón y ellas debían meter un juguete para que que les hiciéramos caso.
7. Enseñarnos a caminar y evitar objetos peligrosos
Nadie estaba más emocionada que ella cuando empezábamos a caminar (bueno, tal vez papá) sin embargo ella veía como peligro potencial los objetos que estuvieran en el camino, incluido el perro.
8. Andar en bici o patines sin chocar
Mamá iba enseñándonos la manera correcta de pedalear o como dar pasos con los patines mientras nos cuidaba de las personas y objetos que tuviéramos cerca (un árbol por ejemplo).
¿Hay alguna actividad que repitas gracias a mamá? Estos 7 momentos son los que nuestra mamá ha sido nuestra mejor cómplice.