El acné en la espalda, también conocido como “bacné”, es un problema común que puede tener varias causas y que puede presentarse a cualquier edad.
Lo sabemos, este problema puede ser molesto, porque no puedes reventarte los barros o no puedes recargar tu espalda, porque te duelen.
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Incluso, te causan conflicto porque no pue des usar blusas con escote en la parte trasera o porque tienes demasiados y te incomodan.
Sin embargo, es importante saber por qué aparecen, para que así arregles el problema que los está causando.
Razones por las que te sale acné en la espalda
1. Exceso de sebo.
La piel produce un aceite natural llamado sebo que, cuando se produce en exceso, puede obstruir los poros y formar acné. Las áreas con muchas glándulas sebáceas, como la espalda, son más propensas a sufrir de este problema.
2. Sudoración excesiva.
La sudoración, especialmente si se combina con ropa ajustada o materiales sintéticos, puede provocar que el sudor se quede atrapado en la piel y contribuya a la obstrucción de los poros.
Esto es frecuente en personas que practican deportes o realizan ejercicio físico intenso.
3. Ropa ajustada o no transpirable.
Usar ropa apretada o que no permite que la piel respire adecuadamente (como camisetas de materiales sintéticos) puede causar irritación y aumentar el riesgo de acné en la espalda. La fricción constante también puede agravar la situación.
4. Hormonas.
Los cambios hormonales, como los que ocurren durante la adolescencia, el ciclo menstrual, el embarazo o el uso de anticonceptivos, pueden aumentar la producción de sebo, lo que contribuye a la aparición de acné.
5. Estrés.
El estrés aumenta los niveles de cortisol en el cuerpo, lo cual puede hacer que las glándulas sebáceas trabajen más, contribuyendo a la formación de acné.
6. Alimentación.
Una dieta rica en alimentos con alto índice glucémico (como azúcares refinados y carbohidratos) puede influir en la aparición de acné.
Algunos estudios sugieren que ciertos alimentos pueden aumentar la inflamación y alterar los niveles hormonales, lo que favorece la formación de granos.
7. Productos cosméticos.
El uso de lociones, cremas o bloqueadores solares comedogénicos (es decir, que obstruyen los poros) puede contribuir al desarrollo del acné en la espalda. Es importante asegurarte de usar productos que sean adecuados para la piel propensa al acné.
8. Genética.
La predisposición genética juega un papel importante en el acné. Por lo que, si tus padres o familiares cercanos han sufrido de acné, es más probable que tú también lo experimentes, tanto en la cara como en la espalda.
9. No limpiar adecuadamente la piel.
La falta de higiene o la limpieza insuficiente después de hacer ejercicio puede hacer que el sudor, las bacterias y la suciedad se acumulen en la piel, lo que favorece la formación de acné.
10. Medicamentos.
Algunos medicamentos, como los esteroides o los anticonceptivos, pueden alterar el equilibrio hormonal y causar brotes de acné en diferentes áreas del cuerpo, incluida la espalda.
¡Ojo con esto!
Si el acné persiste o es severo, lo ideal es consultar con un dermatólogo para obtener un tratamiento adecuado.
No los toques, ni tampoco le pidas a alguien que te los reviente. Tampoco es recomendable que te pongas remedios caseros.
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