Por mucho tiempo hemos creído que somos personas saludables al hacer ejercicio todos los días, comer alimentos nutritivos y dormir de forma correcta.
Sin embargo, esto no nos asegura que tengas una vida 100% saludable.
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Recientemente se comprobó que las personas más saludables del mundo no van al gimnasio. Y aunque lo dudes, esto no es una broma.
Las personas saludables no van al gimnasio, pero sí hacen esto…
El secreto de las personas más saludables del mundo se resguarda en esta naturaleza nómada que muchas veces reluce en las zonas azules.
Las zonas azules son aquellos lugares del mundo en los que se está rodeado de maravillosos paisajes llenos de color azul.
Puede ser el mar, un gran cielo despejado, un río, una laguna o cualquier área natural que sea azul.
Los habitantes de estos sitios pueden ser las personas más sanas del mundo, debido a que la esperanza de vida aumenta cuando alguien se encuentra rodeado de un entorno que lo empuja a moverse.
Un grupo de investigadores determinó que las zonas azules llevan a una rutina con mayor movimiento natural.
Al estar en un ambiente natural que te inspire, desarrollas hábitos buenos para tu salud como caminar, correr, respirar aire limpio o gozar de un buen clima.
Las grandes ciudades no te brindan estos beneficios
Las ciudades llenas de tránsito en donde caminar es imposible, suelen son lugares muy peligrosos para tu salud.
Debido a que la mayoría de las personas pasan la mayor parte del tiempo sentadas en un escritorio durante más de 5 horas para después hacer un recorrido de 2 horas a casa sentadas en el auto o el transporte.
Más del 90% de la población en casi cualquier país vive de forma sedentaria. Pocos se mueven más allá de lo estrictamente necesario.
Sí puedes ser más saludable…
No todo está perdido, ya que existen algunas formas de agregar inspiración a tu vida y así lograr una vida saludable como alguien que vive en una zona azul.
Entre las opciones se encuentra es usar la bicicleta, caminar en un parque o trotar.
Disfruta de los bosques, los parques o cualquier lugar cercano a ti. Toma aire fresco, date unos minutos para vivir la esencia de tu cuerpo y reconocer su poder curativo.
Los gimnasios no siempre son buena idea porque no sales del encierro, tu mente y cuerpo permanecen en un mismo sitio sin desplazarse por lugares nuevos.
Aunque puedes usar la caminadora, si es la única opción cercana.
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