advertisement advertisement
Buscar
  • Escribe al menos 3 letras para buscar.

7 cosas que debes considerar al elegir una madrina o un padrino

Será más que tu compadre

Toma nota

Si estás por elegir madrina o padrino, queremos que medites bien la decisión pues, aunque no lo creas, puede ser algo de lo que después te arrepientas.

Te puede interesar

7 acciones que te ayudarán a evitar el rebote

Si tu relación te da estas 5 cosas, necesitas salir corriendo

¡Échale un ojo al Facebook de Hey Hey Hello! ?

Cuando tenemos hijos queremos que todo lo que esté a su alrededor sea favorable para su desarrollo y felicidad.

El que cuenten con un entorno lleno de amor es indispensable, pues sabemos que, además de las necesidades económicas, está el que puedan sentirse amados y seguros con la gente que los rodea.

De este modo, elegir madrina o padrino es tooodo un tema.

Son personas que elegimos pues «si llegamos a hacer falta», ellos velarán por el bienestar de nuestros hijos.

Ante esta responsabilidad, hay mucho que decir… No es algo que se deba pensar a la ligera.

Advertisement

Al elegir una madrina o un padrino…

1. Asegúrate de que quieran serlo.

Lo primero es que, ante las posibilidades que tengas de elegir a la madrina o al padrino, te cuestiones si ellos realmente quieren tener esa distinción que también es una gran responsabilidad.

elegir-madrina-padrino

Unsplash/Jose Escobar

A veces, a pesar del amor que pueden expresar, no están preparados para el vínculo y es válido.

El padrinazgo es algo que no debe ser obligado, requiere un vínculo fuerte con los papás y una conexión con el niño o con la niña. De lo contrario, será un padrino o madrina lejanos, es decir, no procurarán a tu hij@.

2. Primero, piensa en la familia.

Un padrino o una madrina estará al lado de tu hijo en los momentos importantes, por ello, puedes pensar en algún integrante de la familia.

Esa persona deberá haberte mostrado su cariño y su compromiso hacia tu bienestar y hacia el de tu hijo, debió mostrar interés y amor para tu familia.

En caso de que en tu familia nadie te inspire esa relación…

3. Que sea un amigo muy muy muy cercano.

Evita irte por un amigo que acabas de conocer o que te cae bien porque puede ser que por algún motivo desaparezca de tu vida.

Debe ser una amiga o amigo cercano, que ya haya comprobado que está ahí para ti y para tus hijos.

Sabemos que siendo familia o siendo amigo aún está el riesgo de que se aleje de su vida, pero mientras más estén conscientes de lo que son y lo que serán, más juntos estarán.

4. No te guíes por el dinero.

Es un gran error pensar que el padrino o madrina que tiene solvencia económica es la mejor opción.

Existen muchos casos en los que los padrinos, a pesar de tener recursos, no se involucran o aportan en la formación de los pequeños.

Por otro lado, están los que se esfuerzan y procuran cubrir algunas necesidades de los pequeños aunque eso signifique ahorro y más trabajo.

No es una regla que el padrino o la madrina deban pagar todo, cada quien dará lo que puede o quiera dar, no hay regla que diga lo contrario.

5. Piensa a futuro.

No sólo será su padrino o su madrina cuando sea pequeño, durante su adolescencia y vida adulta también tendrán esta unión.

Visualiza la relación de tu hijo con su madrina/padrino a futuro.

6. Que no te pese el qué dirán.

Si estás segura de tu decisión, que no te importe el qué dirán.

7. Para ti, ¿qué significa ser madrina o padrino?

Por último, repasa qué es lo que significa para ti que la persona que elijas sea madrina o padrino.

Con base en tu reflexión, piensa en la persona que podría apegarse a ese concepto.

Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.

Advertisement