Elhamy Agina es el nombre de un integrante del parlamento egipcio que propone que las mujeres que aspiren a entrar a la universidad, deben comprobar mediante un análisis médico que siguen siendo vírgenes.
Parece una idea absurda y sí, lo es. ¿Cómo es que personas con el criterio de Agina pueden tomar puestos legislativos?
Agina se ha caracterizado por hacer este tipo de iniciativas polémicas en donde la sexualidad es vista como una disfunción individual, incluso ha hecho declaraciones como que 200 refugiados que murieron ahogados no merecen su simpatía por perseguir ilegalmente una fantasía no garantizada, o que la mitad de los hombres egipcios sufren disfunción eréctil o que la mutilación genital femenina es necesaria debido a que los hombres egipcios son sexualmente débiles.
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Sí, pasemos saliva y regresemos al punto de la Virginidad=Universidad…
Estas declaraciones dadas a conocer por The Washington Post, han dejado indignados a más de uno, y es que además de someter a la mujer y relacionar su inteligencia directamente con su vida sexual, Agina tiene la idea de que una vez que la chica compruebe su virginidad, el resultado será dado a conocer a su familia, sea o no sea aceptada. Es decir, se le notificará a la familia si la mujer se encuentra en condiciones «honorables» para continuar con su nivel educativo.
¿Alguien puede repetirnos qué siglo estamos viviendo?
El legislador, que además se ofreció a revisar personalmente los resultados de las aspirantes, agregó que si esta medida enfurece a alguien, significaría que son de las personas que probablemente no contarían con este «requisito» para continuar con sus estudios.
Para terminar de sorprendernos, Elhamy Agina forma parte del comité de Derechos Humanos. ¡No, no es broma!
Lo que podemos agradecer ante tan absurdas y retrógradas ideas es que otros miembros del parlamento egipcio no estuvieron de acuerdo con sus ideas, lo que nos da un rayito de esperanza en materia de respeto, igualdad, tolerancia y equidad.
No podemos perder de vista que estas situaciones pasen en otro países, entendamos que como mujeres debemos apoyarnos, crecer y mantenernos a salvo de todo aquello que nos corte las alas, nos prive de nuestros derechos y nos sepulte bajo toneladas de prejuicios.