Si ya lo tienes en mente, es momento de que las palabras salgan de tu boca.
Sabemos que puede ser complicado pedir un aumento, pero con lo que vas a leer a continuación terminaremos por convencerte.
1. Ya lo piensas
El simple hecho de que lo pienses significa que ya necesitas un estímulo más para seguir haciendo las cosas bien, seguramente ya llevas un buen tiempo con el mismo sueldo, han aumentado tus responsabilidades laborales o se han ido alargando tus horarios, así que si ya lo piensas es porque sabes que estás dando lo mejor de ti y eso se está reflejando en la cantidad de trabajo cumplido.
2. Se están ajustando presupuestos para el siguiente año
Estos últimos meses del año, las empresas suelen destinar los presupuestos par el siguiente año, así que si quieres ser contemplado, será mejor que lo hagas de una vez, sino, aunque quieran y se les haga justo, puede ser que los número no te favorezcan por no hablar antes.
3. Ya vieron un año de tu trabajo
Claro, si en tu trabajo ya vieron cómo trabajaste durante un año, tienes un argumento importante para poder pedir el aumento, es más fácil que consideren tu rendimiento laboral si ya tienen una referencia de tu desempeño y así puedan ajustar los números a tu favor por saber que darás el ancho para desquitar tu nueva cantidad en el cheque.
4. Cero vacantes
Pensemos que incluso ya comienza a haber una planeación laboral por proyectos del próximo año con los cuales necesitarán abrir plazas, será probable que se pueda hacer una negociación y que a ti te ubiquen en un nuevo puesto lo que incluya una promoción para ti, a que traigan a una persona nueva y tengan que invertir recursos en capacitación.
5. Cero crecimiento
Pensemos el caso contrario al punto anterior, las cosas no van tan bien e incluso tendrán que recortar personal, si tu trabajo habla bien de ti y tú hablas por tu trabajo, podrán considerarte como un elemento con disposición para quedarse y adaptarse a las nuevas circunstancias, claro, siempre y cuando se llegue a un acuerdo económico favorable a ambas partes, es decir, que te quedes tú con más trabajo y un ajuste de sueldo.
6. Puedes proponer
El hecho de que el año esté acabando te abre la posibilidad de proponer una estrategia, un cambio, un puesto o lo que creas que pueda optimizar algo de tu trabajo, tómalo en serio, aterriza tus ideas y haz una propuesta por escrito, así verán que tu interés por el sueldo no sólo es económico, sino que tienes una visión que no les conviene dejar ir.
7. Hazlo ya
Seamos honestas, cuando las condiciones laborales ya no son tan satisfactorias una empieza a buscar nuevas alternativas, así que está en tus manos que tu trabajo sea reconocido porque la primera persona que debe de estar orgulloso de tu desempeño eres tú misma, sólo hazlo, esperando que las cosas fluyan, sino, no habrá quedado en ti y será el momento de tomar una decisión.
Estos son siete puntos que debes tener presente para pedir el aumento, recuerda que tu trabajo debe hablar bien de ti y hacerlo en persona es mucho mejor que hacerlo por medio de correos electrónicos, ármate de valor y pide una cita con tu jefe ¡mucha suerte!