Si ya tienes más de 30 y te sigue saliendo demasiado acné, es momento de ver que hay un problema de salud que lo está causando.
Así como lo lees, este no es exclusivo de los adolescentes y muchas personas lo siguen experimentando incluso después de los 30.
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Y esto se debe a diferentes factores, algunos de ellos son muy comunes y otros podrían reflejar un problema que no has visto.
A continuación, te contamos los detalles, para que analices tu caso y encuentres la solución adecuada para ti:
Razones por las que te sigue saliendo acné
1. Cambios hormonales.
Esta es una de las causas más comunes del acné en adultos. En las mujeres, puede estar relacionado con el ciclo menstrual, el embarazo, la menopausia o el uso de anticonceptivos.
Los niveles fluctuantes de hormonas, como los andrógenos, pueden aumentar la producción de sebo (aceite), lo que obstruye los poros y causa brotes de acné.
2. Estrés.
El estrés prolongado puede provocar un aumento de la producción de cortisol, una hormona que puede aumentar la actividad de las glándulas sebáceas en la piel, contribuyendo a la aparición de acné.
Además, el estrés puede llevar a hábitos como tocarse la cara o dormir mal, lo que también puede empeorar la situación.
3. Alimentación.
Los alimentos ricos en carbohidratos refinados, como el pan blanco o las galletas, pueden aumentar los niveles de insulina, lo que a su vez puede aumentar la producción de sebo y provocar acné.
También se ha observado que los lácteos y ciertos alimentos ricos en grasas trans o azúcares refinados pueden estar relacionados con el acné.
4. Uso de productos para la piel.
Algunos productos cosméticos, cremas hidratantes o maquillaje pueden ser comedogénicos, es decir, pueden obstruir los poros y causar brotes de acné.
Es importante revisar los ingredientes de los productos que usamos y asegurarse de que sean no comedogénicos, especialmente si tienes piel propensa al acné.
5. Medicamentos.
Ciertos medicamentos, como los corticosteroides, los fármacos anticonvulsivos o los tratamientos hormonales, pueden provocar brotes de acné.
Si sospechas que algún medicamento está relacionado con la aparición de acné, es importante consultar con tu médico.
6. Enfermedades.
Algunos trastornos hormonales, como el síndrome de ovario poliquístico (SOP), pueden estar asociados con brotes de acné en mujeres adultas.
El SOP puede causar un desequilibrio hormonal que aumenta la producción de sebo y favorece la aparición de acné.
7. Cuidado inadecuado de la piel.
Si no se tiene una rutina de cuidado adecuada, como limpiar el rostro correctamente o no desmaquillarse antes de dormir, los poros pueden obstruirse.
La acumulación de células muertas de la piel y aceites puede provocarlo también.
8. Exposición al sol.
Aunque el sol puede mejorar temporalmente el aspecto del acné al secar las lesiones, la exposición excesiva a los rayos solares puede causar inflamación en la piel y empeorarlo.
Además, muchos productos para el cuidado de la piel o tratamientos tópicos pueden hacer que la piel sea más sensible al sol, lo que también puede agravarlo.
9. Factores genéticos.
La predisposición genética también juega un papel importante en el desarrollo del acné.
Si en tu familia hay antecedentes de acné, es más probable que puedas seguir experimentándolo durante la adultez.
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