Mentir una vez es inapropiado, mentir 2 veces es innecesario, pero decir mentira tras mentira puede ser señal de una enfermedad: la mitomanía.
Existen personas que sienten la necesidad de mentir para ganarse el reconocimiento o admiración de las personas, personas que literalmente mienten por convivir. Cuando este comportamiento es compulsivo podemos hablar de mitomanía.
¿Crees que tu pareja puede ser un mitómano? Estas son las señales de alerta:
1. Siempre es el mejor protagonista de sus historias
Puede resolver todo él solo, no necesita pedir porque siempre encuentra fabulosas soluciones por su cuenta.
2. Sus discursos pueden ser incongruentes
Su afán por sorprenderte será tan alto que podría ser incongruente si lo analizas sin ver su bien delineada barba.
3. Surgen historias de la nada
No sabrás cómo llegaron a esa historia pero ya estás en un bosque sin gasolina viéndolo empujar el carro.
4. Defenderá sus historias hasta con los dientes
Si por algún motivo cuestionas alguna de sus hazañas, los mitómanos encontrarán una forma de convencerte de que todo es real y por supuesto lo harán con base en nuevas e inventadas historias.
5. Puede olvidar detalles de su historia
Serán tantas las cosas que pongan de su cosecha que pueden llegar a olvidar o cambiar detalles que ya habían dicho.
6. «Cuando yo…»
Si tú tienes una historia fabulosa de viaje a la playa pidiendo aventón, el mitómano siempre tendrá una historia aún más fabulosa que la tuya.
Una persona que padece este tipo de comportamiento tiene inseguridades y baja autoestima, así que si algo no te convence de lo que te cuenta en sus pláticas, pon atención en los detalles y sigue su discurso, cuestiónalo y observa su reacción.
Las personas que dicen mentiras de forma patológica necesitan ayuda de un especialista así que no minimices la situación.