Si últimamente has notado que tus hijos se la viven en el celular y ya no conviven tanto la familia, debes estar atenta.
¡Ojo! No queremos asustarte y menos asegurar que esté haciendo algo malo, sino que prestes más atención a su entorno y a la etapa que está viviendo.
Te recomendamos:
7 acciones que hace una mujer con carácter
Razones por las que no debes engañar a un hombre que te engañó
¡Échale un ojo al Facebook de Hey Hey Hello! 😉
Que tus hijos se la pasen pegados al celular puede deberse a varias razones, y entenderlas puede ayudarte a manejar la situación de forma más efectiva.
Por esto, a continuación, te contamos por qué no se despega de su teléfono y no pasa tanto tiempo en familia:
Motivos por los que tus hijos se la viven en el celular
1. Fuente de entretenimiento constante.
Los celulares ofrecen acceso a juegos, videos, redes sociales, música, y mucho más. Es fácil que los niños y adolescentes se enganchen porque siempre hay algo nuevo y emocionante.
2. Está descubriendo su identidad.
El celular le permite explorar lo que le gusta, desde videos, juegos, youtubers, redes, hasta personas. Incluso, temas de los que cree que no puede hablar contigo.
3. Recompensas inmediatas.
Aplicaciones como TikTok, YouTube o juegos móviles están diseñadas para activar el sistema de recompensa del cerebro (dopamina).
Eso los hace altamente adictivos, especialmente para mentes jóvenes.
Al ser joven, aún no tiene del todo desarrollada la capacidad de autorregulación. Por eso, puede estar horas sin darse cuenta.
4. Socialización.
En la adolescencia, sus amigos son su mundo. Chatear, compartir memes, videos o jugar en línea puede ser más importante que hablar con la familia.
Muchos usan el celular para mantenerse conectados con sus amigos a través de WhatsApp, Instagram, etc.
Hoy, estar “desconectado” puede generarles ansiedad o miedo a quedarse fuera. Incluso, ya empieza a compararse con otros. Si todos sus amigos usan cierto juego o red, él también quiere estar ahí.
5. Falta de otras alternativas.
Si no tiene actividades estimulantes fuera del celular (deporte, arte, tiempo en familia, etc.), el celular se convierte en su única vía de escape o diversión.
Incluso, se vuelve su lugar seguro, porque no tiene otro apoyo en su entorno.
6. Evitación o refugio emocional.
En algunos casos, el uso excesivo puede ser una forma de evitar problemas emocionales, como estrés, ansiedad, baja autoestima o conflictos en casa o en la escuela.
7. Autonomía y privacidad.
Empieza a querer más independencia, y el celular se convierte en un espacio “solo suyo”.
Incluso, es una forma de escape o regulación emocional, si está estresado, aburrido o triste, el celular puede ser su forma de evadirse.
¿Qué puedes hacer?
– Habla con ellos sin juzgar: Pregunta qué le gusta tanto del celular y escucha antes de corregir.
– Pacta tiempos y reglas: No necesitas prohibir, pero sí establecer límites razonables.
– Ofrece alternativas reales: Actividades interesantes, salidas, deporte, tiempo de calidad.
– Da el ejemplo: Si tú también estás mucho en el celular, será difícil que él lo vea como un problema, así que, también dale un respiro y demuéstrale que no necesitas estar pegada a tu teléfono.
– Usa herramientas digitales para ayudar: Puedes usar controles parentales o apps de gestión del tiempo como: Google family link (para Android), tiempo en pantalla (iPhone), qustodio o FamilyTime.
Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y TikTok.