advertisement advertisement
Buscar
  • Escribe al menos 3 letras para buscar.

Frases que debes decirte cuando sientas que eres una mala madre

¿Te ha pasado?

Es momento de leer esto

Sentirte como una “mala madre” es algo que muchas mujeres experimentan en algún momento de su maternidad.

Especialmente cuando están agotadas, frustradas o cuando las cosas no salen como esperaban. Incluso, cuando alguien le realiza un comentario desafortunado.

Te recomendamos:

Acciones que te ayudan a recuperar una amistad

¿Encontraste a tu pareja con otra? Esto es lo que debes hacer

¡Échale un ojo al Facebook de Hey Hey Hello! 😉

Sin embargo, esto no significa que realmente lo sean, ni tampoco quiere decir que estén haciendo todo mal.

Entendemos que quieras darle lo mejor a tus hijos y que cuando no lo logras te sientas como una mala madre, pero no lo eres.

Porque te estás esforzando y le estás brindando lo mejor de ti. Sí, puedes cometer errores, pero eso es porque eres humana, no porque seas una mala madre.

Advertisement

Como ya hemos estado en tu lugar, queremos brindarte algunas frases que puedes repetirte cuando te sientas así, para reconectar contigo misma y con tu valor como madre:

Frases que debes decirte cuando sientas que eres una mala madre

1. Estoy haciendo lo mejor que puedo con lo que tengo.

Reconoce tu esfuerzo, incluso en los días difíciles. Porque te estás esforzando y lo sigues intentando, aunque las cosas se compliquen.

2. Equivocarme no me hace una mala madre, me hace humana.

Ser madre no significa ser perfecta. Sí, tú eres su modelo a seguir, pero eso no significa que no debas cometer errores, sino que debes enseñarles a superarlos, aprender de ellos y seguir avanzando.

3. Mis hijos no necesitan una madre perfecta, necesitan una madre presente.

Tu amor y tu presencia son más importantes que cualquier estándar. Así que no te aferres a cumplir un estereotipo imposible.

Lo mejor que puedes hacer por tus hijos es estar ahí para ellos.

4. Pedir ayuda es un acto de amor, no de debilidad.

No tienes que hacerlo todo sola, es más, no deberías hacerlo. Porque aunque lo dudes, tienes una gran red de apoyo a tu alrededor.

5. Me permito descansar sin sentir culpa.

Tu bienestar también importa e, incluso, es esencial para darle lo mejor a tus hijos. No necesitas sacrificarte todo el tiempo ni tampoco castigarte por tomar un tiempo para ti.

Porque necesitas cuidarte, para poder cuidarlos.

6. Estoy criando a mis hijos con amor, y eso es suficiente.

El amor constante es la base de una crianza sana. Por lo que debes de ver que ya les estás dando lo esencial.

7. Los momentos difíciles no definen mi maternidad.

Un mal día no te convierte en una mala madre. Tú también tienes el derecho a tener días complicados y nadie debería hacerte sentir mal por esto.

Los días buenos, en donde estás con ellos y les das lo mejor, son tu mejor recordatorio de que eres una buena madre.

8. Mis hijos me aman por quien soy, no por lo que logro.

No necesitas ganarte su amor. Porque ya lo tienes. Así que, no conviertas tu maternidad en una competencia, porque vas a sufrir, si lo haces.

9. Ser madre es aprender todos los días, no tener todas las respuestas.

La maternidad es un camino de crecimiento mutuo. Habrá días en donde todo se complique y habrá otros en donde todo esté en tu contra.

Lo importante es que sigas aprendiendo de ambos y que no te aferres a creer que lo sabes todo.

10. Hoy no fue un día perfecto, pero hubo amor, y eso bastó.

Celebra las pequeñas victorias cotidianas, porque son muy válidas y son el motor que te permitirá seguir adelante cuando las cosas se compliquen.

Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, TwitterInstagram y TikTok.

Advertisement