El cabello perfecto es uno de los sueños que tenemos sin importar nuestra edad o que que lo tengamos lacio, chino u ondulado, sin embargo, hay errores muy comunes que cometemos con nuestro cabello que lo debilitan, maltratan o contribuyen a su caída.
Toma nota y deja de hacerlos a partir de este momento:
1. Lavarlo diario
Claro, es súper importante que luzca brilloso y que huela bien, pero someterlo diario al agua, no permite que se seque en su totalidad y conserve humedad que lo debilita.
2. Secarlo con la toalla
La fricción entre tu toalla y tu cabello, lo maltrata y quiebra. Sí enrédalo con la toalla pero no lo frotes para quitar el exceso de humedad, mientras más naturalmente se seque será mucho mejor.
3. Someterlo a calor
Ya sea con la secadora o la plancha, el calor lo debilita, los protectores térmicos pueden ayudarte a disminuir el efecto, pero evita usar estos productos cada vez que puedas.
4. Usar el mismo shampoo
Tu cabello suele acostumbrarse al producto así que dejarás de obtener los resultados de las primeras veces, lo ideal es usar uno distinto una que otra vez, algunos recomiendan una vez cada tres semanas, además podrás remover residuos del shampoo que usas con regularidad.
5. Lavar el cabello con agua caliente
El agua caliente abre los poros y esto provoca que las glándulas sebáceas de tu cabeza produzcan más grasa y se te haga el cabello graso, además, es más fácil que tu cutícula se mantenga en buen estado.
6. Cepillar el cabello húmedo
Esto también provoca que debilites y quiebres tu cabello, lo mejor es desenredárselo o cepillarlo lo más seco posible.
7. No usar acondicionador
Para ayudarte a hacer bien el punto anterior, lo mejor es usar acondicionador, evita usarlo en tus raíces.
8. Desenredar con peine
Si se te hace un nudo en el cabello, debes desenredarlo con los dedos.
9. Tocarlo todo el tiempo
Sabemos que nos hace sentir y ver bonitas cuando lo acomodamos con naturalidad, pero tocarlo todo el tiempo o jugarlo con nuestros dedos, abre las puntas.
Ahora ya lo sabes, ayuda a tu cabello a que luzca hermoso, lleno de vida y brillo, recórtalo una vez al mes y evita maltratarlo cuando menos te lo esperas.