Enamorarse del potencial de alguien, en lugar de la persona real, es muy común, pero puede ser peligroso emocionalmente si no se identifica a tiempo.
Porque te aferras a ver esa versión mejorada y buscas cambiar a tu pareja, lo que provocará roces entre ustedes.
Te recomendamos:
Señales de que tomas decisiones por impulso (y por eso te equivocas tanto)
Señales de que tu pareja no sabe complacerte en la cama
¡Échale un ojo al Facebook de Hey Hey Hello! 😉
Incluso, que él se moleste por la situación, porque no ve ese potencial que tú sí y sabrá que no lo amas de verdad y solo quieres moldearlo a tu conveniencia.
Por esto, aquí te dejo algunas señales claras de que podrías estar enamorándote más de lo que “podría llegar a ser” ese hombre que de lo que realmente es ahora:
Señales de que te estás enamorando de su potencial
1. Piensas constantemente en cómo podría cambiar.
Siempre te dices a ti misma: “Si tan solo madurará…” “Cuando consiga un trabajo estable todo será diferente…” “Seguro que en el futuro será más cariñoso…”
Estás invirtiendo en una versión futura, no en lo que tienes hoy. Incluso, estás siendo egoísta, porque ves su potencial, pero de la forma más conveniente para ti.
2. Ignoras sus comportamientos actuales porque “tiene buen corazón”.
Toleras actitudes irresponsables, inmaduras o incluso dolorosas, porque crees que “en el fondo es bueno” o que “solo necesita tiempo”.
Te estás aferrando a lo que crees que esconde, no a lo que te muestra.
3. Tú pones más energía en su crecimiento que él mismo.
Lo motivas, lo impulsas, le das ideas, lo empujas a mejorar, mientras que él se conforma o no actúa. Solo espera a que todo le llegue de forma fácil.
Si tú haces todo el trabajo emocional y de mejora, estás desequilibrando la relación o, incluso, obteniendo migajas.
4. Te ilusionas más con el futuro que con el presente.
Te proyectas con él en “cómo serán las cosas cuando madure/cambie”, pero no estás disfrutando ni valorando su versión actual.
Estás idealizando lo que esperas que llegue, no lo que tienes.
5. Lo justificas todo con excusas externas.
“No es que no quiera comprometerse, es que tuvo una infancia difícil” “No me llama porque está estresado con el trabajo…”, en todo momento te dices palabras de consuelo, para seguir soportando, porque crees que su potencial destacará muy pronto.
Normalizas actitudes poco saludables porque crees que son temporales o que con tu apoyo cambiarán.
6. Tu amor se basa más en su potencial que en su realidad.
Te atrae lo que podría llegar a ser como pareja, como profesional o como persona, pero no te satisface lo que es hoy. Amas la idea de él, pero no necesariamente a él.
7. Sientes que estás esperando constantemente.
Vives en espera, como si su mejor versión estuviera siempre a punto de aparecer, pero no llega. Estás más en la expectativa que en la realidad.
8. No te sientes plena.
Pero te dices a ti misma que ese hombre “va a valer la pena” tarde o temprano. Debes ver que hay un vacío que llenas con esperanza, no con hechos.
¿Qué hacer si te pasa esto?
– Pregúntate: ¿Me enamoré de él o de la versión que construí en mi cabeza?
– Observa sus actos, no su potencial.
-Acepta que el amor real se basa en lo que es hoy, no en lo que podría ser mañana.
Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram y TikTok.