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Señales de que tu pareja no se siente satisfecho en la intimidad

Ya no le gustan tus caricias…

Tal vez, prefiere las de alguien más

Si las cosas en la intimidad han cambiado, porque tu pareja no tiene ganas o lo evita, podría ser porque no está satisfecho en la cama.

Y aunque al principio quiso activar la chispa de la pasión, ahora no tiene nada de ganas de hacer el amor contigo.

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Tal vez, creas que este no es tu caso, porque él ya te dijo que todo está bien y que simplemente ahora no tiene ganas, pero si ya pasó mucho tiempo desde la última vez, debes ver que sí hay un problema.

Puede ser que él ya no disfrute de tus caricias porque está gozando las de alguien más. Y no queremos asegurarte nada, pero si buscamos que no te ciegues y veas que esa es una gran posibilidad.

A continuación, te presentamos algunas acciones con las que él te deja claro que no está satisfecho con la intimidad que tiene contigo.

Señales de que tu pareja no se siente satisfecho en la intimidad

1. Cambios en la frecuencia de la intimidad.

Si de repente hay menos interés en tener intimidad sin una razón clara (como estrés o enfermedad), podría ser una señal de insatisfacción o desconexión emocional.

Prefiere negarse a decirte lo que no le gusta en la cama.

2. Evita el contacto físico.

Rechaza tus besos, caricias, abrazos o contacto espontáneo que antes sí disfrutaba. 

Te permite que lo hagas fuera de la cama, pero cuando están en ella, de inmediato se quita, menciona que está cansado o que no es un buen momento.

3. Se ve aburrido.

Se muestra distraído o apático durante la intimidad. Incluso, parece desconectado, con poca iniciativa o actúa como si estuviera “cumpliendo” más que disfrutando el momento.

Sabrás que es así, ya que, lo hace porque tú se lo pediste y a él no le quedó de otra.

4. No habla de lo que no le gusta.

Si no expresa sus deseos, fantasías o lo que no le agrada, puede que esté reprimiendo su insatisfacción para evitar conflictos.

Te ha llegado a mencionar lo que le gusta y lo haces, pero no te dice que lo haya disfrutado o que estuvo bien.

5. Hace comentarios pasivo-agresivos.

Puede lanzar frases ambiguas o críticas disfrazadas como: “siempre es lo mismo”, “antes era diferente”, “¿otra vez?”, “qué flojera”; en lugar de hablar abiertamente de lo que no le gusta en la cama.

Y cuando tú quieres ser directa y dejar las cosas en claro, se enoja y se aleja.

6. Evita la intimidad emocional.

La falta de satisfacción íntima muchas veces va acompañada de una desconexión emocional más amplia.

Es decir, menos conversación, poca complicidad y menos interés por lo que le pasa al otro.

7. Busca distracciones constantes.

Se refugia en el celular, trabajo o redes sociales justo cuando podrían compartir tiempo íntimo. Incluso, ahora sale más o llega tarde a casa, para no estar contigo.

8. Comparaciones incómodas.

Mencionar cómo era la intimidad en relaciones pasadas o hacer comparaciones específicas con su ex, puede reflejar una insatisfacción clara. 

No es que te quiera dar en el ego, sino que no tiene el valor de decirte lo que está pasando en realidad.

9. No hay cambios, aunque tú propongas mejoras.

Si has intentado hablar o probar cosas nuevas y sigue sin involucrarse o no es capaz de mostrar un poco de interés, puede ser señal de un problema más profundo.

Es decir, a él tú ya le das igual o, como ya mencionamos antes, ya tiene quien lo atienda y lo satisfaga.

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