Si últimamente no te sientes cómoda ni feliz con ciertas personas con las que antes te llevabas bien, es momento de reconsiderar su amistad.
Ya que, al aferrarte a pensar que es un buen amigo y solo es una mala etapa, no te hará ningún bien y puede que entres en una dinámica tóxica o dañina para ti.
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Porque en todo momento harás cosas que no te hagan bien o con las que te sientas extraña o menos tú y al final te perderás por alguien que no te valoro.
Por esto, si hoy sientes que esa persona no es tanto tu amiga o que la relación que tienen no te está haciendo ningún bien, es momento de reconsiderar la amistad.
A continuación, te contamos sobre aquellas cosas que te ponen en alerta y que no debes ignorar:
Señales de que debes reconsiderar tus amistades
1. Comienzas a cuestionar sus actos.
Es decir, comienzas a ver que ciertos comportamientos no son normales y que no estás exagerando al sentirte incómoda.
Incluso, no te parece divertido su actuar y menos sus palabras, porque ya no es parte de su diversión, sino que lo ves como un acto para lastimarte.
Lo que indica que no estás loca ni que eres demasiado sensible, sino que esa persona sí está haciendo cosas para lastimarte.
2. Dudas.
Poco a poco puedes ver que no fue un simple error y que estás frente a una red flag que te está advirtiendo que esa amistad no es la mejor.
Es decir, muchas veces, esa persona ha hecho cosas que te hicieron sentir incómoda o que te lastimaron y aunque recibiste una disculpa, la equivocación, se ha vuelto muy común.
Porque sigue haciéndote cosas que no te agradan, para después rogar perdón, pero jamás redime las cosas de verdad, solo promete y nunca cumple.
3. Cuestionas el futuro.
¿Puedo vivir con esto o tarde o temprano me arrepentiré de seguir adelante?, esta es una pregunta clave cuando comienzas a cuestionar una relación, ya sea de amor, amistad o laboral.
Porque ahora ya no te sientes feliz y cómoda, sino que parece que estás cargando con muchas cosas que no te agradan.
Por lo que comienzas a ver que no es normal sufrir, sentirte mal a su lado, resolver sus problemas o cargar con toda la culpa y responsabilidad de sus acciones.
Incluso, comienzas a ver que no quieres esto para tu futuro, pero tampoco para tu presente.
4. Quieres darte prioridad.
Te das cuenta de que primero estás tú y que no estás obligada a cumplir con las expectativas de otras, sobre todo, cuando nunca te han dado su apoyo o no de la misma forma en la que tú lo haces.
Incluso, al querer ponerte en primer lugar en tu vida, comienzas a ver que esa amistad no está contenta con esa decisión y te hace creer que estás equivocada.
Dejando entre ver que no es una buena amistad y que solo te usa a su conveniencia.
5. No quieres vivir aferrada.
Si es una amistad de años, es normal que te sientas mal de reconsiderar lo que tienen e incluso, te aterra terminar la relación.
Pero al mismo tiempo no quieres vivir atada a algo que no te hace sentir cómoda contigo misma.
6. Los defectos pesan.
Antes los dejabas pasar, no les dabas mucha importancia o los justificabas, pero ahora ya no puedes hacer eso, porque han sobrepasado todos tus límites. Y esto demuestra que estás en un lugar que no te hace bien.
7. Tu intuición te lo dice.
Si ya llevas tiempo reconsiderando esa amistad o sintiendo que algo no está bien, es porque tu intuición lo tiene muy claro y ella no se equivoca.
Ya que, está viendo y sintiendo cosas que tú no quieres, pero que poco a poco te ha dejado ver, para que puedas abrir los ojos.
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