En ocasiones, terminar una amistad es más doloroso que tener el corazón roto porque una relación amorosa llegó a su fin.
Porque pierdes a una persona en la que confiabas, valorabas y estuvo en momentos importantes de tu vida.
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Pero ahora las cosas son diferentes, ya no son las mismas personas ni tienen los mismos intereses. Crecieron, pero su amistad se quedó estancada y es momento de avanzar sin ella.
Sí, suena muy fácil decirlo, pero es demasiado complicado seguir adelante sin esa amiga con la que tenías un sinfín de planes y anécdotas.
Sin embargo, si esa amistad ya no te hace feliz y ahora te duele, es momento de terminarla de verdad, y te decimos qué hacer para superar este proceso de la forma menos dolorosa posible:
Lo que debes hacer si se terminó esa amistad que tanto apreciabas
1. Dejar claro que terminó.
Lo sabemos, para ti esa amistad terminó en el momento en el que te diste cuenta de que tú la mantenías o que solo te buscaba por favores.
Incluso, cuando esa persona hizo algo que te lastimó y dejó ver que no era tu amiga. Sin embargo, para seguir adelante debes dejar en claro que ya terminó esa amistad y no la quieres más en tu vida.
Puedes hablar con esa persona o mandarle un mensaje “despidiéndote”, esto para cerrar el ciclo y dejar en claro que ya no eres su amiga y que ya no hay solución, lo mejor es que cada quien tome su camino.
2. Ya no tenerla en tus redes sociales.
Tal vez, creas que esto es exagero o que no sufrirás como cuando tienes a tu ex en redes sociales, pero sí conservas esa amistad en ese ámbito, te sentirás incómoda.
Primero porque sabrás o tendrás la intuición de que te stalkea y no te desea lo mejor. Y también porque tú tendrás esas ganas de espiar lo que hace o deja de hacer.
Incluso, podrías caer en espiar sus movimientos y sentirte reemplazada por sus nuevas amistades, sin importar que tú le pusiste fin a su amistad.
Lo mejor en esta situación es que termines esa relación en todos los aspectos y en todos los lugares.
3. Reparte.
Sí, esa persona era tu incondicional y con la que hacías todo, y ahora cada actividad que hagas sin ella te parecerá doloroso e incómodo, es momento de repartir.
Es decir, si era con la que hacías todo, comienza a elegir a otras personas para hacer alguna actividad que hacías con ella.
Por ejemplo, ten una amiga para las fiestas, para ir de comprar, hablar de amor, de sexo o con aquellas que te inspiren felicidad y te hagan sentir bien contigo misma.
Si no tienes más amigas, puedes apoyarte de tus compañeras de trabajo, familiares, pareja o de tu mamá.
4. Honra el tiempo que tuvieron esa amistad.
Es decir, no cuentes sus secretos ni hables mal de esa persona. Tal vez, te enteres de que ella lo ha hecho, pero no debes pagarle con la misma moneda.
Lo sabemos, tal vez, se lo merece, porque traicionó tu confianza antes y sigue comportándose como una mala amiga y persona.
Sin embargo, debes saber que tú no eres igual a ella, y así como tú le entregaste una buena amistad desde el inicio, lo harás en el final.
Incluso, ten presente que lo que Pablo dice de Juan, dice más de Pablo que de Juan
5. Elige tu paz.
Terminar una amistad es algo doloroso y habrá momentos en donde creas que te equivocaste y fuiste la culpable de todo.
Sin embargo, debes tener presente que si algo no se alimenta, se muere. Y tú alimentaste esa relación en todo momento, pero no hicieron lo mismo por ti.
Así que, ten presente que es mejor soltar, para obtener algo mejor, que conformarte con una relación con la que te sientes chiquita y poco comprendida.
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