Si por fin tu crush te invitó a salir o le diste la oportunidad a ese hombre que tanto te insistió, pero al terminar la cita no quiso pagar la cuenta, es momento de analizar las cosas.
Porque este acto sí es una bandera roja que no debes dejar pasar, y no, no se trata de que él deba derrochar todo su dinero en ti o que esté obligado a hacerlo.
Si no que por respeto y educación, el que invitó a salir, debe pagar, independientemente del género.
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Y si no lo hace, es momento de superar este momento incómodo con dignidad e inteligencia.
Pero antes de enojarte con él, de reclamarle o de salir huyendo del lugar, tienes que ver si no quiso pagar la cuenta porque no sabía que era una cita. A continuación, te decimos algunas cosas que debes considerar:
1. Expectativas vs. realidad.
Si él dijo “te invito”, normalmente eso implica que va a pagar. Pero a veces la gente usa esa frase más como sinónimo de “vamos a salir”. Lo ideal es que todo el mundo sea claro, pero ya sabemos que eso no siempre pasa.
Por esto, debes ver si no quiso pagar porque es un patán o porque creía que era solo una reunión de amigos, en donde cada uno paga su cuenta.
2. Intención.
Incluso si iban a pagar mitad y mitad, muchos valoran que la otra persona al menos ofrezca pagar. Si él ni siquiera intentó o lo manejó mal, eso puede ser una bandera roja, dependiendo de lo que tú valores en una relación.
3. Cultura y contexto.
En algunos lugares o generaciones, se espera que quien invite pague. En otros, se asume que cada quien cubre lo suyo. No hay una regla universal, pero sí importa cómo se comporta la persona contigo en general.
Por lo que, si es de otro país o tiene otras costumbres, puedes dejarlo pasar o no pensar lo peor. Para después comentarle el tipo de tradiciones que tienes tú o cómo te gustaría que se llevaran a cabo los pagos de sus citas.
¿Qué hago si me invitó a salir y no quiso pagar la cuenta?
Si no te gustó cómo lo manejó, está bien que te sientas incómoda o enojada. Es válido tener tus estándares.
Porque si para ti el gesto es importante, puedes simplemente decidir no repetir la salida. O hablarlo, si sientes que vale la pena.
Principalmente, si ese hombre te gusta de verdad o ha tenido detalles más importantes contigo. Incluso, si mencionó que en la próxima cita él paga.
Si fue solo una confusión, fue un comportamiento torpe, nervios o falta de experiencia, tal vez, puedas dejarlo pasar. Ya que, si lo demás fluyó bien, podrías ver cómo se comporta en una segunda salida (si es que quieres otra).
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Pero si te sentiste incómoda, el momento te hizo sentir mal o poco valorada, tal vez, deberías pagar tú la cuenta y no volver a verlo nunca.
Porque no está mal dividir gastos, claro, pero el momento y la forma lo son todo. Si te dice que pagues tu parte o todo, sin tacto, puede mostrar falta de empatía o simplemente que no tiene mucha experiencia saliendo.
Incluso, si esa actitud va acompañada de otras señales (falta de atención, poco esfuerzo, egoísmo), podrías estar viendo una parte de su personalidad que se repetirá en otras situaciones.
Por lo que lo ideal es que pagues lo tuyo y hasta lo de él, para que así le dejes en claro que tú puedes hacerlo y que no te molesta. Pero al mismo tiempo que no te interesa verlo nunca más.
Y no porque no haya pagado en esa cita, sino porque primero te dijo algo o te dio a entender esto, y después se echó para atrás. Situación que con el tiempo se volverá repetitiva y en tu contra.
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