Si tu pareja todo el tiempo te habla con groserías, es momento de ver que estás con el hombre equivocado y que él no te quiere.
Porque te está dejando claro que no te respeta y que no le importan tus sentimientos. Ya que, esa no es la manera en la que debería hablarte ni tratarte.
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Probablemente, creas que no pasa nada malo o que ya te acostumbraste a que todo el tiempo te hable con groserías, pero debes ver que esto no es bueno para tu relación amorosa.
A continuación, te dejamos algunas posibles razones por las cuales tu pareja podría estar utilizando este tipo de lenguaje y notes que no son nada buenas ni sanas para ti…
Si tu pareja te habla de esta manera, es momento de terminar la relación
1. Falta de respeto.
Una de las razones más comunes por las que él te habla con groserías es porque no te respeta.
Ya que, decide usar este tipo de palabras para minimizarte, hacerte sentir mal, manipularte y hacerte pensar que no vales la pena o no mereces un amor sano.
Debes ver que él te ve como si fueras inferior o que esto es algo normal en su dinámica, para que así pueda usarte a su conveniencia.
2. Estrés o frustración.
A veces, las personas usan groserías cuando están muy estresadas o frustradas, y pueden no estar midiendo bien su lenguaje.
Si tu pareja está atravesando un período difícil (ya sea por trabajo, familia, o problemas personales), podría estar descargando esa frustración contigo.
Sin embargo, esto no justifica su comportamiento, porque te está demostrando que piensa que tú eres la culpable de sus problemas.
3. Pocas habilidades de comunicación.
Algunas personas no han aprendido a comunicar sus sentimientos o frustraciones de manera adecuada.
Por esto, usan groserías es su forma rápida para expresar sus emociones, especialmente si nunca han sido educadas en técnicas de comunicación respetuosa y efectiva.
4. Normalización de este lenguaje.
Si en el entorno de tu pareja (familia, amigos, o su cultura) es común usar groserías como parte del lenguaje cotidiano, es posible que no vea nada inapropiado en ello.
Para él, las groserías pueden no tener el mismo peso que para ti. Sin embargo, si ya le has mencionado que te incomoda y no hace nada para mejorar su lenguaje, debes ver que no le importan tus sentimientos.
5. Confusión de dinámicas de poder.
Algunas personas pueden usar un lenguaje grosero o despectivo para intentar afirmar control o poder dentro de una relación.
Si una de las partes siente que tiene más autoridad o desea imponer su punto de vista, las groserías pueden ser una forma de manipulación emocional.
Y si las usa durante una pelea o para demostrar que tiene la razón, debes ver que estás con alguien que no te ama y que solo quiere ganar.
6. Desconoce tus límites.
Tu pareja no tiene claro que sus palabras te lastiman o te hacen sentir incómoda.
En este caso, puede que no esté tomando en cuenta tus sentimientos y que no se haya dado cuenta de lo doloroso que es para ti el lenguaje grosero.
Pero si ya se lo mencionaste y no es capaz de evitarlas o cambiar la forma en la que se comunica contigo, debes ver que no le importas y tampoco tus límites.
¡No te quiere!
Lo sabemos, crees que no es su intención o que no es tan malo como parece, pero una cosa es que sea directo, honesto o con un carácter fuerte.
Y otra muy diferente que todo el tiempo te esté hablando como si no valieras la pena o como si te odiará. Por esto, debes ver que este trato no es digno de una relación sana, amorosa y respetuosa.
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