Una mujer que fue mal amada no deja de creer en el amor, al contrario, toma más fuerza para encontrar a una persona que valga la pena.
Ser mal amada no significa que fuera su culpa, simplemente confió en alguien, creyó que esa persona estaría a la altura y le daría todo lo que se merece.
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Lamentablemente no fue así, pero eso no significa que ya no quiera enamorarse y que le cierra las oportunidades al amor.
Ella sabe que hoy perdió, pero que llegará el día en el que ganará y obtendrá mucho amor de sobra y no sobras de amor.
Lecciones que aprendió una mujer que fue mal amada y que aún cree en el amor
1. Ya no quiere un novio.
Es decir, ya no quiere jugar a tener una pareja, ahora desea estar con alguien que se comprometa en la relación un compañero de vida.
Sí, puede tener relaciones casuales y pasar momentos de diversión con amigos, sin embargo, desea estar a una persona que la acompañe y la apoye.
2. Va con cautela.
Sabe muy bien cuándo y con quién compartir sus emociones y sentimientos. Sin embargo, sabe que no puede abrirle las puertas de su corazón todo el mundo, primero porque no lo merecen y segundo porque no sabrían valorarlo.
3. Sí, quiere encontrar el amor.
No es que sea una romántica empedernida y que piense que su vida terminara siendo una película romántica, simplemente tiene fe y sabe que amor con amor se paga.
Que siempre habrá alguien que te decepcione, pero también que sea la luz que llegue alegrar sus días.
4. Es más fuerte.
Las caídas y los golpes de la vida siempre te ayudarán a despertar y aceptar que a veces se gana y otras se aprende.
Debemos tomar lo mejor en la peor situación y seguir luchando hasta el final.
5. No es su culpa.
Una mujer mal amada sabe estar en paz con un mal amor, es decir. No se culpa ni se atormenta, tiene presente que una relación siempre es de dos, pero que no puede funcionar si una no sabe lo que quiere o a quien.
Ella dio lo mejor, pero el otro no supo manejar la situación.
6. No guarda rencor.
Vivir un mal amor definitivamente te lastima, pero obsesionarte con él y guardar rencor podría herirte aun más.
Lo mejor es soltar, perdonar y olvidar. Atarte a lo que no fue no es sano para ti ni para tu corazón.
7. No es el fin del mundo.
Duele ser mal amada, pero no es el fin del mundo. Hay cosas más horribles en el mundo y personas en una peor situación. Sí, estás dolida y triste, pero esto solo es momentáneo, tienes el poder de salir de ahí y encontrar algo mejor.
Lo importante es que te aprecies y sepas afrontar esta situación pues hoy fuiste mal amada, pero mañana podrás ser la más querida.
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