Después de pasar por una infidelidad sentimos que todo está perdido y que no solo hemos perdido a alguien especial. Nuestra dignidad y amor propio están por los suelos.
Quisiéramos volver al pasado y resolver las cosas con nuestra pareja o descubrir qué hicimos mal en la relación.
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Sin embargo, esto no sirve de nada. Enfocarnos en recuperar a alguien que no nos supo de valorar es una perdida de tiempo y de amor propio.
Lo mejor que podemos hacer por nosotras en esta situación es recordarnos que no fue nuestra culpa y que merecemos un amor que realmente nos valore y nos respete.
5 lecciones de amor propio que debes recordar después de una infidelidad
1. Quiérete más.
En todo momento debes tener claro que eres una mujer increíble que merece un amor bonito. Debes recordarte lo grandiosa que eres y que una infidelidad no cambiará eso.
Simplemente te ayudará a darte cuenta de que mereces a alguien mejor y que vales mucho para estar soportando un amor mediocre.
Debes quererte más, para que a la próxima no dejes entrar a cualquier a tu vida y menos a tu corazón.
2. Sé valiente.
No cualquiera tiene la valentía para seguir tras una decepción amorosa, pero tu sí. Sabes que no estás peleada con el amor, sino con las personas que no saben amar.
Solo debes ser más cautelosa para la próxima vez.
3. Aprende.
A veces las decepciones amorosas te enseñas más que un buen amor. Hoy no perdiste, simplemente aprendiste que esa persona no era la mejor para ti.
4. No confíes a ciegas.
Deja de creer que el amor es ciego o que amar significa confiar en todo lo que tu pareja te diga. Sí, se vale confiar plenamente, pero siempre teniendo los pies bien fijos en el suelo.
No permitas que te den alas para que después te dejen caer.
5. Eres libre.
Estar en una relación no es sinónimo de que te ates a una persona para siempre y que no puedas ir más allá tú sola.
Eres libre dentro y fuera de una relación, pero siempre respetando tus sentimientos y a la otra persona.
También eres libre de perdonar una infidelidad, pues si esa persona aún te hace feliz y es lo que tú quieres está bien.
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