Las que hemos pasado por varias decepciones amorosas sabemos que estar en una relación de pareja tiene sus cosas buenas, no tan buenas y otras realmente terribles.
Entre las últimas, no podemos dejar de destacar la angustia y ansiedad inicial, y que surge de la duda de saber si le gustas o no; o el estrés que conlleva que la relación fluya, que haya entendimiento entre ambos y que los conflictos sean superados.
¿Te ha pasado?
Por eso, si bien estar enamorado te hace sentir con emociones intensas y gratificantes; no estarlo, no es tan negativo o triste como se piensa.
A contrario, estar soltera puede ser un momento propicio para que te enfoques en otras cosas de tu vida que son también importantes.
¡Checa estas 3 que te enumeramos a continuación!
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1. Darte cuenta que necesitas atender tu amor propio.
Hay un error que cometemos la mayoría de las mujeres cuando nos gusta alguien: lo dotamos de cualidades extraordinarios, lo ubicamos encima de nosotras y lo idealizamos tanto que creemos que podemos estropear -hasta con un estornudo ruidoso- cualquier oportunidad con él.
Esto, por supuesto, genera estrés; te hace sentir más insegura; y si su respuesta no es satisfactoria, resquebraja tu amor propio.
Al contrario, cuando no te gusta nadie no buscas ni adaptarte ni impresionar a nadie, y eso hace que tu personalidad renazca con más fuerza, seguridad y libertad.
2. Reorganizar tus prioridades.
Cuando nos gusta alguien o ya es nuestra pareja, solemos pensar en el otro y tomar en consideración su opinión y gustos para tomar cualquier decisión.
Sin embargo, esta actitud desaparece cuando estamos solas. Una situación que nos ayuda a enfocarnos más en nuestro propósito, ser más competitivas, más perseverantes y claras en lo que debemos hacer.
También dedicamos mayor tiempo a actividades que nos gustan, nos relajan y nos permiten conocernos y sentirnos mejor con nosotras mismas.
3. Eres más acertada en tus decisiones de vida.
Dejas de ser impulsiva y cada decisión la asumes desde un espacio de madurez y bienestar propio.
Por eso, tus amigos te buscan para pedirte consejos y para que los ilumines con tu claridad.
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