Muchas veces, después de una decepción amorosa decimos que todos los hombres son iguales, pero podría ser porque elegimos el mismo tipo.
Caemos con la misma piedra, pero en otra presentación o nos aferramos a cambiarlo de parecer, cuando es una misión imposible.
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Aunque no lo creas hay hombres equivocados que te llevan a conocer al correcto, porque después de estar con ellos te das cuenta de que mereces algo mejor.
Y principalmente, a ya no aceptar amores mediocres, patanes o que solo quieren diversión por un rato.
Si te has topado con este tipo de hombres, tienes que saber que está bien caer con ellos, pero no debes encariñarte con su amor vacío, porque solo obtendrás decepciones.
Sí, se vale disfrutar del equivocado mientras llega el indicado, pero debes reconocer que ese “amor” durara poco.
7 hombres con los que una mujer tiene que lidiar para encontrar al bueno
1. El que promete, pero no se queda a cumplir.
Es un experto en hacer ghosting, te jura amor eterno y todo parece ir bien con él, pero cuando las cosas se ponen serias decide huir y desaparecer por completo.
No vale buscarlo ni rogarle, solo disfruta que te alzó el ego y recuerda que te salvaste de estar con un cobarde.
2. El que te regala placer.
Con él la pasarás muy bien en la cama, pero no tendrás un vínculo especial ni amoroso.
Lo bueno de este hombre es que te deja claras sus intenciones y no deja que vueles alto para después desilusionarte.
3. El que no ves, pero está ahí.
Es una especie de fantasma que declaró su amor por ti, pero no tuvo el valor de ir por algo más, por esto, solo ronda por tus redes sociales y reacciona en todo momento.
No te da mucho, pero tampoco te quita. Así que solo puedes disfrutar de los likes que te deja y que no interfiere con tu “ganado”.
4. El que te da cariño por conveniencia.
Este tipo de hombre puede ser un oso cariñoso si se lo propone, pero no lo hace con la intención de hacerte feliz, sino por conveniencia propia.
Tienes que cuidarte de él, porque solo está presente en los días buenos, pero huye cuando los malos llegan.
5. El limosnero y con garrote.
Da poco y exige mucho. Las cosas se deben hacer a su manera o no se hacen. Todo es bajo sus condiciones y a su conveniencia.
De él puedes aprender que, si no es mutuo, no sirve.
6. El resucitado.
El ex que jura que ya cambió y que ya entendió que tú eres la buena. La realidad es que solo está viendo si lo aceptas para que vuelva a cometer los mismo errores de siempre.
Lo mejor es tenerlo de lejitos o ponerlo a prueba por 30 días.
7. El toro.
Es el clásico hombre que se cree el más galán y que jura que tiene un ganado detrás de él, pero la realidad es que es un toro con vaca que solo busca una opción B.
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