Hacerse del rogar puede parecer una buena idea para aumentar el interés en la otra persona, sin embargo, puede resultar mal, ¿te ha pasado?
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Riesgos de ser la mujer que se hace del rogar
Todo pude salir mal…
1. Puedes confundir a la otra persona.
Cuando alguien se hace del rogar puede actuar de forma extraña y mandar señales confusas, lo que podría significar ser una conquista difícil.
Y, hay que decirlo, no siempre las personas se ven gratamente tentados a ligar cuando algo parece difícil.
2. Puedes desanimarlo.
Hacerte del rogar puede parecer que no tienes interés, además, si no cuidas los modos, puedes mostrarte completamente indiferente, lo que no será de ayuda.
3. Puedes dar una impresión equivocada.
Puedes terminar viéndote desinteresada en el otro, sí; pero también poco amable, interesada, convenciera…
Si bien, la opinión de los otros podría resultarte indiferente, hacerte del rogar tiene más desventajas si realmente deseas iniciar una relación.
4. Demostrar cierta inseguridad.
El darte importancia al hacerte del rogar puede interpretarse como alguien que intenta tapar sus inseguridades.
5. Demostrar soberbia.
Por el contrario del punto anterior, cuando alguien se hace del rogar, puede parecer una persona demasiado soberbia.
Esto podría ser una moneda al aire de si le dará buenos resultados en el amor o no.
Si tú eres la que se hace del rogar, o es tu crush, puedes tomar una decisión, seguir con el juego a pesar de las consecuencias o dejar de insistirle a alguien que no sabe ser real y honesto.
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