Saber cuándo dejar ir una amistad puede ser difícil y doloroso, pero a veces es necesario para proteger tu bienestar emocional, mental o incluso físico.
Porque te estás desgastando por mantener una amistad que no está funcionando y que solo te está haciendo daño.
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Lo sabemos, las amigas deben estar en las buenas y malas, pero también debes saber o darte cuenta de que una amistad debe ser recíproca para que funcione.
Y si tú eres la única que da su tiempo, cariño, atención, empatía y hasta dinero, debes abrir los ojos y darte cuenta de que debes dejar ir esa amistad, porque ya no es mutua ni sana para ti.
¿Cuándo dejar ir una amistad?
1. La amistad es unilateral.
Eres siempre quien inicia el contacto, escucha, o apoya. No hay reciprocidad, por lo que das mucho y recibes poco o nada.
Sigues siendo amiga de esa persona porque tú te esfuerzas en mantener la amistad viva, mientras que la otra persona no mueve ni un dedo.
2. Te sientes peor después de estar con esa persona.
Te drena emocionalmente, porque sientes ansiedad, culpa o inseguridad cada vez que interactúas con esa amistad.
Debes dejar ir a esa persona de tu vida, porque ya no te brinda bienestar y ahora solo te hace sentir mal.
3. Hay faltas de respeto.
Ignora tus límites, te manipula o te menosprecia y siempre se justifica diciendo que es broma y que entre “amigos” es bueno llevarse de esta forma.
Sin embargo, hay conductas abusivas, humillaciones o críticas destructivas, que no deberías pasar por alto en ningún tipo de relación o amistad.
4. Han cambiado demasiado y ya no hay conexión.
Necesitas dejar ir esa amistad porque ya no comparten valores, intereses o formas de ver la vida.
Sobre todo, porque las conversaciones se sienten forzadas o incómodas, y ya no te sientes en un lugar seguro, sino en compañía de alguien que solo te critica o juzga.
5. Hubo traición o pérdida de confianza.
Si ya rompió tu confianza de manera significativa, es decir, con mentiras, hablar mal de ti, contar secretos, coquetear con tu pareja o robarte dinero, debes dejar ir esa amistad.
Porque si ya lo hizo una vez, volverá a pasar, sobre todo, si ella ya te tomó la medida o va con la bandera de que las amigas deben perdonar todo.
6. Ya no creces en esa relación.
Si sientes que esa persona te estanca, en vez de ayudarte a crecer, ya no puedes ser tú misma sin sentirte juzgada o has perdido oportunidades por su culpa, es momento de cortar esa amistad.
No solo porque te está metiendo el pie, sino porque te llenará de conflictos y hará que te estanques en todos los aspectos de tu vida.
¡No lo olvides!
Dejar ir una amistad no te convierte en una mala persona. A veces, simplemente se cumplen ciclos y debes priorizarte por tu bienestar.
Liberarte de relaciones que ya no son sanas, abre espacio para personas más alineadas con quien eres ahora.
Así que, cierra esa amistad de forma respetuosa, clara y directa, para que así, no sientas que fuiste la mala de la historia y también, porque alguna vez, esa persona fue parte importante de tu vida.
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