En ocasiones nosotras mismas somos nuestra peor enemiga, nos ponemos el pie y hacemos que nuestros objetivos no se cumplan.
Permitimos que el miedo, los rencores, inseguridades y el odio dominen nuestra vida, por lo cual nos sentimos tristes y solas.
Más de tu interés:
10 prendas que NUNCA debes usar si eres bajita
15 señales de que él no es para ti… ¡Mereces algo mejor!
Pero es momento de dejar esto atrás, mirar hacia adelante y cambiar el rumbo de nuestra vida.
Sí, cometimos errores en el pasado, pero es tiempo de ver nuestro brillante futuro, aceptar lo mal que hicimos y perdonarnos por eso.
Y ahora que el año está por terminar, debemos perdonarnos por esto y comenzar desde cero:
1. Por tropezar con la misma piedra.
No una, no dos veces, fueron miles. En las que te aferraste a esa persona que sabías que no te quería, pero aún así quisiste quedarte a su lado.
Ahora puedes ver con claridad que esa persona no vale la pena y que mereces algo mejor.
2. Por no cuidar de tu salud.
Ahora que has madurado sabes que tu salud es un factor sumamente importante y es tu principal prioridad para ser feliz.
3. Por no tener tiempo para ti.
Acéptalo, más de una vez has cambiado tus planes para ayudar a otros. Dedicaste tu tiempo a personas que no lo valían ni lo agradecieron.
Ahora ya sabes que siempre debes pensar en ti. Dedica tu tiempo para hacerte feliz y consentirte.
4. Por complacer a otros.
Te has hecho pedazos para poder completar a otras personas, ya sea tu familia, pareja o tu trabajo. Te has desmoronado para que ellos cumplan con sus objetivos, mientras que tú solo tenías las migajas.
Es momento de ser egoísta y luchar por tus sueños.
5. Por haberte callado.
Y no decir lo que sentías en el momento correcto, por temor a que se alejarán o que se enojarán.
Es momento de sacar todo lo que siempre has guardado.
6. Por mentirte.
Hacerte de la vista gorda y fingir que todo estaba bien cuando sabías que no era así.
Es momento de ser sincera contigo misma y aceptar las cosas como son.
7. Por no quererte.
Y juzgarte por todos tus “defectos” o por aquellas cosas que pensabas que no son hermosas en ti, por caer en los estereotipos o creer cosas que te decían la gente malintencionada.
Es tiempo de levantar la mirada, sacudirte las heridas, secar las lágrimas y perdonarte por todo lo que hiciste en el pasado, ahora lo importante es ser feliz contigo misma.