A veces, nos toca aceptar que la relación que tenemos no es tan sana como creemos, aquí es donde entran las diferencias para saber si es amor o apego.
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Antes de empezar, intenta leer a continuación con honestidad y amor propio.
Reflexiona e intenta llegar al punto en el que si no haces algo por tu estabilidad, estás provocando que lo incómodo de tu relación siga pasando.
No es que seas la culpable, es que quizá te está faltando asumir a responsabilidad de estar en una relación de pareja.
¿Cómo saber si es amor o apego?
Primero, debes aterrizar un poco el concepto de amor, ¿qué es para ti el amor? ¿Qué crees que sea el apego? ¿Cómo crees que se manifiesta el amor? ¿Cómo crees que se vive el apego?
1. Amor es libertad, el apego es posesión.
La definición del amor puede ser muy personal, sin embargo, es importante que percibamos uno de sus elementos básicos, libertad.
De este modo, la voluntad y el deseo de estar junto a una persona, están sostenidas con la decisión.
Pongámoslo en palabras simples, el amor es decidir con libertad el estar al lado de una persona.
No puede ser amor si nos sentimos obligados a compartir nuestro tiempo, cuerpo y energía con alguien más.
Así que todo surge con la libertad de ser nosotras mismas con alguien que también decide con libertad estar en nuestra vida, dicen por ahí: «es una jaula abierta al cielo».
Mientras que el apego, es posesión, es una liga que estira y afloja, pareciera que puedes alejarte en libertad, pero hay una fuerza que te hace retroceder, te jala al mismo lugar en el que estabas antes.
Es una cárcel que pareciera tener la puerta abierta por la que puedes salir cuando tú desees, pero no es así, porque lejos de vivir con libertad hay sumisión:
«Si me alejo mucho, el otro se irá; si el otro se aleja, es porque se va a ir; si se aleja, me voy yo».
2. El amor te ayuda a crecer, el apego te hace pequeño.
El apego implica reducción, cerrar, disolver el mundo individual y así centrar toda la atención en la pareja.
Por otro lado, el amor te ayuda a crecer y a potencializarte, te motiva a crecer.
El amor no sólo te ayuda a cumplir tus sueños, en realidad, el amor no te reprochará el tiempo que dedicas al trabajo diario por cumplir tus metas.
El apego, se pondrá celoso de ése tiempo invertido en otra cosa que no es la relación de pareja.
3. El amor es confianza, el apego es miedo.
Cuando hay amor, la relación estará llena de confianza, cuando es apego habrá miedo por perder a la otra persona.
Este miedo le abre el paso a la inseguridad, a la irritabilidad y a los celos, porque el vínculo con el otro está sostenido por que nos «quitarán algo que nos pertenece o que nos costó mucho trabajo obtener».
Cuando en realidad, el amor no se obtiene, se construye con la voluntad de dos personas que desde su libertad, deciden estar juntas.
4. El amor te da paz, el apego te la quita.
Esto es simple, el amor da paz, claro, por momentos da una felicidad increíble, pero una relación sana, es paz.
Mientras que el apego te quita la paz, es más fácil sentir tristeza, ira o incertidumbre que paz.
5. El amor respeta tu estado de ánimo, en el apego, tu estado de ánimo depende de tu relación de pareja.
Esto también tiene que ver con el nivel de dependencia o codependencia emocional.
Así que uno puede llegar a creer que sufre porque ama mucho, cuando en realidad sufre porque ama de más o está depositando expectativas en una pareja o relación, más que manejar sus propias emociones.
6. El amor apoya, el apego controla.
Mientras que el amor contribuye a que vueles muy alto para tu propia realización, el apego irá controlando y meterá su cuchara cuando algo no le guste.
Es importante que identifiques en tu relación estas 6 diferencias.
¿Te da paz tu relación o te la quita? ¿Tienes que estar haciendo malabares para que todo fluya o se mantenga en calma? ¿Actúas por miedo a que te dejen o por amor?
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