Es que cómo no vamos a seguir hablando de Gladiador si es una joya de 25 años de edad que nunca pasará de moda y nos enseña, entre otras cosas, la importancia de controlar la ira.
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Quise volver a ver la película de Gladiador del 2000 dirigida por Ridley Scott porque alquilé Gladiador II.
Si bien, es una de las cintas que no me canso de ver, le puse especial atención a cómo es que el protagonista maneja sus emociones.
Por supuesto, quiere venganza, sin embargo, no regresa con las emociones a flor de piel cometiendo error tras error.
Máximo logra controlar su ira y es así como hasta el último momento logra su cometido sin un paso en falso.
La escena de Gladiador que nos enseña la importancia de controlar la ira
Si ya viste esta película sabes que Máximo se enfrenta a dolores impensables, la traición y muerte fueron las consecuencias de la envidia y avaricia que despertó su talento y espíritu.
Todo a manos de Cómodo, hijo de Marco Aurelio y quien tomó el trono del Emperador luego de eliminar a su propio padre e ignorar su deseo de ver a Máximo como la máxima autoridad.
La malicia de Cómodo lo llevó a tomar decisiones drásticas y Máximo no lo olvidaría.
Así es como llega la escena que nos enseña la importancia de controlar la ira.
En Pleno Coliseo, cuando ya se sabía la identidad de el gladiador llamado «Español», al frente a los espectadores que eran los jueces a los cuales se debía quedar bien, Cómodo amenazó y le recordó a Máximo de forma salvaje la muerte de su esposa e hijo.
Máximo contuvo la furia y en vez de írsele a la yugular, matarlo y victimizarlo ante el ejército y el pueblo, decide ser prudente y decirle sólo una frase: «el tiempo de honrarte a ti mismo concluirá, alteza», dijo el gladiador e hizo una reverencia.
Esta escena está a una hora 19 minutos de haber iniciado la película y nos habla de uno de las grandes cualidades de Máximo, el control de su ira.
Después de mencionarle la muerte de su hijo y de su esposa de forma atroz y provocativa, Máximo no lo ataca, sino que mantiene el orden y busca el momento perfecto para quitar del poder a quien nunca debió llegar.
Te dejamos el clip de la escena: «el tiempo de honrarte a ti mismo concluirá»
Así sin caer en provocaciones, Máximo sale victorioso.
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