Si tu pareja ya te está pidiendo y hasta exigiendo tener hijos y tú no quieres o deseas esperar, debes ver que él no será un buen padre.
Lo sabemos, esto puede sonar muy exagerado de nuestra parte, porque no lo conocemos, pero estas hay simples señales que dejan ver que él no es el indicado.
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Incluso, en la relación has notado ciertas banderas rojas que te incomodan y que te advierten que él no será un buen padre.
Porque si hoy no es capaz de estar a la altura de situaciones difíciles, más adelante, cuando tengan a sus hijos, él no te apoyará y te dejará con toda la carga.
Por esto, hoy estás a tiempo de saber si él es el indicado o si te dejará con toda la responsabilidad.
Señales de que él NO será un buen padre
1. Falta de responsabilidad.
No se hace cargo de sus actos ni de sus errores. Incluso, tiene problemas para mantener un empleo o administrar su tiempo y dinero. También evita compromisos importantes o no los ve como tal.
2. Muestra poca empatía.
Le cuesta ponerse en el lugar de los demás y minimiza tus emociones o las de otros. También desprecia o se burla de la sensibilidad emocional, incluso de los niños.
Y si no puede ser empático con ellos, tampoco lo hará con tus hijos, aunque lleven su sangre.
3. Mal manejo de la ira.
Se irrita fácilmente y reacciona de forma desproporcionada. Es decir, grita, lanza objetos o actúa con violencia verbal o física.
Si usa el miedo como forma de control, debes ver que no estás en compañía de alguien que merezca ser el padre de tus hijos.
4. No respeta límites ni acuerdos.
Ignora tus decisiones o las modifica sin consultarte, no respeta tus tiempos, tu cuerpo o tus necesidades y rompe promesas frecuentemente, incluso cosas pequeñas.
5. Tiene conductas adictivas.
Abuso de alcohol, drogas, apuestas, videojuegos u otras adicciones, son sus “hobbies” favoritos o su forma de escapar de sus problemas o responsabilidades.
Siempre busca gratificación inmediata sin pensar en las consecuencias.
6. Tiene una visión machista de la paternidad.
Cree que “mandar” es lo mismo que “educar” y considera que su rol es solo proveer económicamente. Espera obediencia sin cuestionamientos.
7. No le interesan los niños.
Dice cosas como “yo no sirvo para eso” o “los niños me molestan”. También, se muestra incómodo o impaciente con niños pequeños y no se interesa en aprender sobre crianza o desarrollo infantil.
8. Es emocionalmente inmaduro.
Le cuesta hablar de sus emociones y evita conversaciones serias o difíciles. Lo peor es que reacciona de forma infantil ante problemas y siempre acude a ti como si fueras su mamá para que lo salves.
9. Tiene un historial de relaciones conflictivas.
Tiene muchas exparejas con las que terminó mal y habla mal de todas sus ex o nunca asume su parte en los conflictos.
Incluso, ha sido denunciado o acusado de abuso emocional, físico o económico. Y con ese historial, deberías tener claro que no será un buen padre.
10. No quiere cambiar o mejorar.
Ignora las señales de que algo anda mal, se niega a ir a terapia o a trabajar en sí mismo. Cree que “así es él” y que no necesita cambiar.
Incluso, te hace pensar que tú estás exagerando todo y que no eres capaz de conformarte con las migajas que te da.
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