Si hay momentos en donde quieres rendirte, tirar la toalla y no seguir luchando por tus sueños, es momento de tomar una pausa.
Lo sabemos, ya no quieres saber nada de ese tema y crees que todo está perdido, pero no es así, aún hay muchas cosas que puedes hacer.
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Sí, hoy todo parece estar en tu contra y crees que lo mejor es rendirte y conformarte con lo poco que tienes o que has logrado.
Sin embargo, debes ver que estás muy cerca de lograr tu meta y que hoy las cosas se ven más complicadas para ti, porque estás a punto de lograrlas.
Solo necesitas descansar, reflexionar y tomar una pausa para ir por más. Tal vez, creas que no es tu caso o que ya todo da igual, pero antes de rendirte, necesitas leer las siguientes frases, para ver que vas bien y que este no es tu final.
Lee esto si sientes que vas a rendirte
1. Hay oportunidades esperando por ti en puertas que ni siquiera has abierto.
Si hoy sientes que ya no lograrás nada o que nadie te dará esa oportunidad, debes ver que necesitas expandir tus horizontes.
Es decir, hay lugares a los que ni siquiera has ido y en donde podrás obtener los logros que tanto has deseado.
Tal vez, ahora estás aferrada a seguir tu plan o a ir por cierto lugar, pero es momento de ver que hay más opciones y que no tienes que casarte con solo una.
2. Tu dirección es más importante que tu velocidad.
Estás a punto de rendirte porque te has apresurado demasiado o quieres lograr todo de inmediato y esto te ha cansado.
Incluso, te ha hecho dudar de ti misma y de tus capacidades, por esto, es momento de tomar una pausa.
Necesitas ver que no estás en una competencia ni que tampoco debes ir demasiado rápido, sino que debes enfocarte en tu meta y en disfrutar el camino.
3. Es tu vida, siéntete libre de reinventarte.
Estás escribiendo tu historia, no una sentencia de vida. Así que, está bien que te quieras rendir, pero también debes ver que podrías arrepentirte después.
Así que, date permiso de relajarte, descansar y de analizar las cosas, porque tu éxito o cada sueño que tengas no es una obligación, sino un deseo que debe darte felicidad.
Si las cosas nos salen a la primera, no te castigues ni seas cruel contigo misma, ten presente que tú debes ser tu mejor aliada y que mereces un mejor trato.
4. Tu situación actual no es tu destino final.
Si las cosas se ven horribles para ti, debes ver que este no es el final de tu historia, ni este momento define tu vida.
Solo es una parte, una que se ve difícil y que puedes superar, porque tienes todo para hacerlo.
No has fracasado, ni tampoco te vas a quedar aquí, sino que es una lección que necesitas aprender para ir con más fuerza en la siguiente ocasión.
5. Tu progreso no siempre tiene que ser visto o validado.
Probablemente, quieras rendirte porque otras personas te han señalado o porque no has podido cubrir sus expectativas y no debes hacerlo.
Necesitas enfocarte en ti y en lo que tú quieres, ellos no necesitan aprobar tus decisiones ni tampoco tienen que ver tus fracasos.
Y no, no se trata de orgullo o de ego, sino de que tampoco van a apreciar tu éxito y solo buscarán una forma de lastimarte o de minimizarlo.
Por esto, no hagas las cosas por ellos, sino por ti y por tu felicidad.
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