Si para ser feliz tienes que conformarte, estás fallándote a ti misma, si tienes que conformarte con lo que te das a ti misma y lo que otros pueden ofrecerte, estás decidiendo mal.
Te puede interesar
¿La pasaron sensacional bajo las sábanas, pero dejó de buscarte?
4 razones por las que un hombre deja a una mujer (aunque le guste mucho)
¡Échale un ojo al Facebook de Hey Hey Hello! ?
No te conformes…
No queremos lastimarte, pero, a veces, necesitamos que alguien nos diga las cosas para que podamos abrir los ojos y encontrar desde dónde estamos tomando decisiones.
El conformismo es una trampa, porque empieza siendo una zona de confort silenciosa, que con el paso del tiempo traiciona a quien no la ve y castiga a quien viéndola no hace nada para salir de ella.

Unsplash/Zohre Nemati
Aplica para todo, para el trabajo, para relaciones amorosas, para amistades…
Pero, lo aplicaremos a la relación de pareja…
Si tienes que conformarte con lo que tu pareja te puede ofrecer, estás obligándote a recibir lo que no te es suficiente.
Y, para ser honestas, todo está mal desde la perspectiva desde la que se decide.
Una cosa es que aceptes y seas feliz con lo que construyes al lado de tu pareja y otra es que anheles algo que no tienes y que piensas que no tendrás.
Desde tus pensamientos estás frenándote, estás limitándote y no puedes culpar al otro por lo que no te ha llegado.
Eres tú la única responsable de vivir con lo que te falta o de no ir por más.
De hacer a un lado la ambición sana de ir por más, de trabajar en uno mismo para salir adelante y hacer que todo conspire a nuestro favor.
De no salir de una relación por miedo, por apego, por costumbre…
Es momento de aceptar que debemos vivir nuestra propia vida con sus buenos momentos, con los malos y con los que ponen a prueba nuestra resistencia emocional.
Si «tienes» que conformarte, estás traicionándote.
Si «quieres» conformarte, acéptalo y sé feliz por ello dejando de quejarte.
No voltees a admirar otras relaciones sintiéndote estancada en la tuya.
Vida solo hay una y puedes trabajar por hacerla a tu manera.
Claro, no será fácil, deberás trabajar en ti a diario, pero valdrá la pena.
No te conformes en vivir tu vida desde un papel secundario, ¡eres la protagonista! Y hasta a ellas les toca correr en el aeropuerto para detener un avión.
Síguenos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.