A todas nos ha cruzado por la cabeza, ¿qué se sentirá el sexo anal? Y aún más importante, ¿cuál es la mejor manera de hacerlo?
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Si te decides a tenerlo con tu pareja (créenos, es mejor que hacerlo con un desconocido), toma en cuenta las siguientes seis cosas:
1. Siempre usa lubricante.
La vagina se lubrica por sí misma, por lo que seguramente nunca has tenido que usar lubricante (aunque siempre es bueno). Sin embargo, el ano no se lubrica y es un área muy sensible. Usa lubricante siempre y en la cantidad que necesites.
2. Tú eliges la velocidad.
No quieras empezar fuerte desde un inicio, trata de empezar lento, recuerda que es un área muy sensible.
3. No todas las posiciones te van a encantar.
Diferentes posiciones estimulan diferentes sensaciones, tienes que elegir la que más te acomode. Hay un sinfín de opciones para que encuentren la ideal.
4. No te preocupes por las heces.
Preocuparse por manchar a tu pareja es de las cosas que más arruinan el coito anal. Claro que es mejor tener el recto limpio y no hacerlo por ahí si sientes que tienes ganas de ir al baño. Tú conoces tus horarios, hazlo cuando creas que ya está limpio o tómate un baño para asegurarte, si tanto te preocupa. Además, si llegas a manchar un poco, trata de tomarle el lado cómico y reír con tu pareja. Esto nos lleva al punto 5…
5. Comunicación.
Todo el tiempo, antes y después. Cuéntale a tu pareja cómo te vas sintiendo, qué quieres que haga y qué no. También quéjate si no te está gustando y recuerda que tu comodidad va primero.
6. Disfruta.
Teniendo todo lo demás en cuenta, ahora disfrútalo. Si lo haces bien, puede resultar muy placentero para ambos y unirlos más.
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