Así fue como lo comprobé…
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Alguna vez alguien me dijo que un casi novios duele más que un ex oficial, no lo creía hasta que lo viví en carne propia.
Cuando terminas una relación la herida tarda en sanar, no puedo decir un tiempo determinado porque cada quien supera a su manera, bajo sus propias condiciones y reglas…
Lo que sí puedo decir es que ningún ex novio me ha dolido tanto como el casi novios de esa persona.
En una relación las personas se quedan para llevar a cabo los planes que tuvieron, en un casi no sabes en que pudo terminar la historia.
Tampoco sabrás si a relación de pareja hubiera funcionado o no, las relaciones de amigos cambian cuando se vuelven novios y, la relación de novios cambia al convertirse en una de esposos.
Tal vez sea por la experiencia, el tiempo y las cosas vividas o compartidas. Tal vez sea por la madurez que vas adquiriendo con el tiempo.
El amor es un verdadero misterio que nadie ha logrado descifrar y dudo que algún día lleguen a hacerlo.
Con el tiempo entendí que un «casi fuimos» duele más que un ex por las promesas rotas, aquellas que nunca llegaron a tomar forma.
Por todos los recuerdos que no fueron lineales, por recordar más la inestabilidad de un «no sé que somos» a la seguridad de lo que hay entre esa persona y tú.
Duelen los tantos planes que una persona llega a idealizar con la otra y, que de la noche a la mañana se apaguen como una vela sin consumirse.
Siempre es mejor decir lo intenté a un qué hubiera pasado, pero a veces aunque tengas las ganas, la otra persona acaba con ellas si no demuestra interés.
Pero creo que la razón principal por la que un casi duele más que un ex, es por la forma tan clandestina en la que una situación puede terminar.
Te puedes quedar con los sentimientos, palabras no dichas cuando debiste, con la espinita sexual…
Pero una cosa es segura: una vez que sigues adelante, no recuerdas mucho del casi que rompió tu corazón. El peligroso mensaje de Facebook que NO debes abrir.