Si estás cansada de hacer mil dietas, o pasar horas realizando ejercicios que te cansan, pero que no te ayudan, podría ser porque se te dificulta perder peso por cosas que no te has dado cuenta.
Intentar de todo no es la clave para perder peso, debes entender que tu cuerpo es un templo y debes cuidarlo con esmero.
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Y no solo por un par de días o semas para que te ayude a obtener el peso que siempre deseaste.
Si se te dificulta es porque estás cometiendo errores que agravan el problema.
O que son cosas que no puedes cambiar de la noche a la mañana, pero que sí puedes erradicar con constancia.
5 razones por las que se te dificulta perder peso
1. Genética.
La genética tiene una gran influencia en nuestro peso, complexión y metabolismo. Pero eso no significa que estés condenada a tener sobrepeso.
Si bien es cierto que, dependiendo de tu complexión, es posible que aumentes o pierdas peso más fácilmente que otras personas
Son tus hábitos los que pueden determinar tu peso con constancia en el ejercicio y una buena alimentación durante toda tu vida, no solo por un corto periodo de tiempo.
2. Estrés.
Las personas con niveles altos de estrés incrementan sus niveles de la hormona cortisol y son más propensos a tener sobrepeso y almacenar mayor cantidad de grasa abdominal.
Además, si estas constantemente estresada, probablemente tomas malas decisiones en cuanto a la comida.
Terminas eligiendo alimentos que te reconfortan emocionalmente, y este tipo de alimentos suelen ser altos en azúcar o grasas.
3. Pensamientos negativos.
Tienes que programarte mentalmente para cambiar tu estilo de vida.
Recuerda que es importante plantearte metas realistas respecto a tu peso. Y no objetivos para complacer a alguien.
Llegar a un peso saludable es lo adecuado, no idealices un número; eso solo hará que te frustres y será contraproducente para alcanzar tus objetivos.
Comienza paulatinamente a cambiar tu estilo de vida, si dejas todo de un jalón podría ser contraproducente y podría provocar que caigas en malos hábitos más veces.
Debes tener presente que lo haces por ti y por tu salud, no porque te detestas o a tu cuerpo.
4. Poca constancia.
Quizá te falte ser constante con las modificaciones que estas aplicando es tu estilo de vida. Dales variedad a tus comidas, esto evitará que caigas en el aburrimiento y declines de seguir con tu plan de alimentación.
Lo mismo pasa con el ejercicio, cuando repites un movimiento una y otra vez, eventualmente se vuelve aburrido y más fácil, lo ideal es mantener a tu cuerpo en constante desafío para que tu quema de calorías no disminuya.
Estar activo constantemente es lo óptimo para perder y mantener el peso controlado.
5. No comes lo suficiente.
Comer poco y tener una alimentación baja en calorías, lo único que hará, será obstaculizar tu progreso, ya que este tipo de restricciones llevan a la pérdida de músculo, que es el tejido más activo del cuerpo.
Para mantener tu metabolismo funcionando a un ritmo constante, debes consumir diariamente al menos 1200 calorías.
Si bien, la rutina y los hábitos son excelentes para poder cumplir con tus metas, también es importante que seas constante y perseverante con los cambios que implementes en tu nuevo estilo de vida.
Sí, al principio a todos se les dificulta cambiar los malos hábitos por buenos, pero con el paso del tiempo podrás dominarlo.
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