Si constantemente estás ansiosa, preocupada o tu pareja te hace sentir miedo, debes ver que a su lado estás en modo supervivencia y esto no es nada bueno ni sano para ti.
El “modo supervivencia” es ese estado en el que te sientes como si estuvieras navegando por obstáculos y protegiéndote constantemente, en lugar de disfrutar de una relación basada en el apoyo mutuo y la satisfacción emocional.
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Estar en una relación de este tipo, significa que no hay amor de por medio y solo sigues ahí por miedo o manipulación.
Tal vez, creas que no es tu caso y que tu pareja es diferente, incluso, lo justificas diciendo que es un poco duro contigo, pero te quiere a su manera, y con esto, solo dejas ver que le temes.
Porque te estás enfocando en excusas y en cegarte ante la realidad por miedo a lo que pueda pasar, por esto, es momento de que abras los ojos y veas que estás en una relación muy tóxica…
Señales de que a su lado estás en modo supervivencia
1. Siempre andas con cautela.
Todo el tiempo piensas dos veces las cosas antes de decir o hacer algo, porque temes que tu pareja se enoje, te critique o te rechace.
Vives en un estado de alerta constante, tratando de evitar conflictos o hacer algo que pueda desencadenar una reacción negativa.
2. Te sientes emocionalmente drenada.
Cuando pasas tiempo con esta persona, te sientes agotada o vacía, como si estuvieras dando más de lo que recibes.
La relación no te nutre emocionalmente, sino que te deja exhausta y con poco espacio para ti misma.
Tu pareja no está ahí para ayudarte a lidiar con las dificultades emocionales, sino que más bien las agrava.
3. Te sientes insegura a su lado.
Si constantemente dudas de tu valor o de tu capacidad para satisfacer las expectativas de tu pareja, esto es una señal de que te encuentras en modo supervivencia.
Ya que, sientes que todo lo que haces es insuficiente o que siempre necesitas “ganarte” el amor o la atención de tu pareja.
4. Vives con la sensación de que todo depende de ti.
Sientes que el bienestar de la relación, e incluso el bienestar emocional de tu pareja, depende completamente de ti.
Esto puede manifestarse en una carga emocional muy grande, porque sientes que todo lo que haces o dejas de hacer puede hacer que la relación funcione o fracase.
Lo peor es que tu pareja no asume su parte en los problemas de la relación, y tú eres la única que se siente comprometida con encontrar soluciones o mantener la paz.
5. Te cuesta ser tú misma.
En lugar de poder ser auténtica y mostrarte tal como eres, te sientes presionada a ser alguien diferente para encajar o agradar a tu pareja.
Te encuentras constantemente sacrificando tus propios intereses, deseos y necesidades para satisfacer a la otra persona, perdiendo poco a poco tu identidad y tu sentido de autonomía.
6. Evitas confrontaciones o discusiones importantes.
En lugar de discutir abiertamente los problemas o preocupaciones, tiendes a reprimir tus sentimientos o evades los temas delicados para evitar la confrontación.
Esto se debe a que sientes que cualquier desacuerdo puede desencadenar una gran pelea o un rechazo.
7. Te sientes culpable sin razón.
Estás en modo supervivencia porque sueles sentirte culpable por cosas que no son realmente tu responsabilidad, como si siempre fuera tu culpa cuando las cosas no van bien.
Tu pareja puede estar proyectando su propia frustración sobre ti, o manipulando la situación para hacerte sentir que eres la única responsable de los problemas.
Puede que estés experimentando gaslighting, donde la otra persona distorsiona la realidad, haciéndote dudar de tu percepción de los hechos.
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