Si por más que trabajes en algo nunca lo consigues, ¿crees que estás haciendo lo mejor, pero nada te sale bien?
Probablemente estás cometiendo un autosabotaje.
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Así como lo lees, te puede parecer una tontería, pues ¿cómo tú misma podrías hacerte eso? Pero, tenemos que advertirte, se hace de forma inconsciente.
Descubre si lo haces y de qué forma puedes evitarlo:
-Confías más en los demás.
Le tienes más fe al trabajo de otras personas que al tuyo, siempre crees que ellos son más capaces que tú, aunque perfectamente podrías hacerlo mejor.
No te das la oportunidad de intentar algo más, tienes miedo y prefieres dejar las cosas a cargo de alguien más, y si hay algún problema no será tuyo.
*Recuerda que la que no arriesga no gana, además debes dar a conocer tu trabajo, sino es así nadie lo valorará.
– El miedo te persigue.
Te han llegado las oportunidades a la puerta de tu casa y no has sabido aprovechar ninguna. Temes arruinarlo cuando ni quisiera lo has intentado.
*Tu miedo a fracasar te deja en una zona de confort, en la que nadie te ve. Necesitas encontrar la valentía necesaria para aceptar lo que la vida te ofrece.
– Estás llena de defectos.
O eso es lo que tú crees, siempre tienes presente tus defectos, hasta tienes una lista de ellos, prefieres ver las cosas de manera negativa.
*Necesitas mejorar tu autoestima y empezar a reconocer que tienes más virtudes que defectos. Y si tienes muchos, puedes enfocarlos en algo positivo.
– Nadie es perfecto.
Hay actividades en las que no eres una maestra, pero quieres dar esa impresión, aunque eres capaz de sacarlas adelante termina siendo un desastre, pues estás enseñando algo que no eres.
*Todos cometemos errores, si te equivocas podrás aprender de ello.
– No sueltas el pasado.
Te persiguen las decisiones que tomaste, las juzgas y las evalúas de manera negativa. Es momento de que tomes conciencia y evalúes la situación.
*En ese momento esas decisiones fueron lo correcto, ahora es momento de seguir y buscar un camino diferente.
No olvides que eres muy competente, no pienses en el resultado final, enfócate en tus acciones y qué aspectos puedes mejorar.
Las consecuencias de tus actos te dejarán ver a esa persona exitosa que se encuentra en tu interior.
¿Has sentido que tus esfuerzos no tienen frutos y no logras obtener el éxito?
