Quizá la palabra «free» suene anticuada, pero la sensación de tener el corazón roto no pasa de moda…
Tener un free es un riesgo, pues a pesar de no tener un compromiso, sí se crea una relación, sí existe un vínculo.
Y no se trata de cualquier vínculo, es uno que implica intimidad, complicidad y una conexión química.
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Primero debemos decir que un free es cuando las personas involucradas deciden estar juntas sin ser novios o compañeros, es una unión bajo sus propias reglas.
Reglas en las que la «exclusividad» sexual y afectiva son delineadas en cada relación.
Así, el compromiso radica en respetar las reglas que ambos tienen en su vínculo.
Hasta este punto ya hay 2 cosas que son necesarias, conocimiento y reglas.
Es decir, hablar de este tipo de relación para que todo esté claro y que ambos estén de acuerdo, además de poner reglas para que se respeten.
Con esto, sólo queda algo por resolver… No enamorarse, (o al menos intentarlo)
5 leyes para tener un «free»
1. Reflexiona qué es lo que quieres.
Primero, respóndete qué es lo que quieres en este momento de tu vida.
Si todo apunta a que te hace bien algo de emoción sin compromiso, sin ser la oficial, sin conocer a su familia ni etiquetarse en redes sociales, vas por buen camino.
2. Pregúntate, ¿qué obtienes de tu free y si eso es suficiente para ti.
Si estás esperando amor o una relación bonita, olvídalo.
Generalmente un free tiene que ver más con una relación física/sexual, estará muy lejos de un noviazgo como el que deseas.
3. Controla tu corazón.
No pierdas de vista que su relación no se basa en el afecto, mientras no olvides que se gustan y se la pasan bien en la cama, podrás ir alejando emociones más complejas y profundas.
El free debe divertirte y complacerte, no generarte ansiedad ni lágrimas, evita enamorarte dejando de imaginar que pasará algo diferente a lo que entre ustedes hablaron.
4. Limita la comunicación.
Ayúdate a no enamorarte restringiendo la comunicación y el contacto con tu free.
Es decir, si empiezan a escribirse o verse diario, es más fácil que alguno de los dos comience a engancharse, mientras el otro siga en la página de no querer nada serio.
La convivencia hace la diferencia en las relaciones, así que limítala, esto incluye evitar palabras «bonitas» o «románticas» que puedan confundirlos.
5. Habla con alguien más.
Te ayudará mucho poder platicar con otras personas que te interesen, así no le centrarás tu atención a una persona y no te cerrarás a una sola opción.
Esto funciona como una pequeña distracción para el corazón y así ayudas a que no se involucre de más.
¡Atención!
*Es importante estar conscientes que un free, un amigo con derechos o como le gustes llamar, es ya una relación, quizá no amorosa o formal pero es una relación.
*Cuando besamos, abrazamos y hacemos el amor con alguien se generan hormonas que están presentes en el enamoramiento por eso es tan fácil que uno o los dos se terminen enamorando.
Sin embargo, es importante escuchar la parte racional que nos permite mantener los pies en la tierra y no caer en un amor no correspondido.
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