Esta vez queremos platicar contigo de una realidad, algo a lo que nos enfrentamos muchas personas, tener una relación amorosa a los 35 años o más.
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Necesitamos seguir normalizando que no hay edad para encontrar el amor, formar una pareja, casarse, divorciarse o estar soltera. Normalicemos hacer lo que nos dé felicidad, incluso si eso es sentirte como adolescente en una relación de pareja a los 35+.
Unsplash/Chermiti Mohamed
Muchas personas tienen la fortuna de encontrar a temprana edad a su ser amado y ser correspondidos.
Estamos otros que, a pesar del tiempo, aún no contamos con esta oportunidad y hemos ido acumulando experiencias con diferentes rostros.
Entonces, un día, nos damos cuenta que empezamos a acariciar más los 40 años que los 20 y aún no tenemos una pareja sólida.
Claro, es súper válido que no todas las personas lo busquen, pero para los que sí queremos una pareja en nuestro proyecto de vida, esto implica lo siguiente:
1. Tener heridas y ya no querer más.
Después de más de 20 años de corazones rotos, la podemos pensar mucho para intentar algo otra vez.
Por lo tanto, ya se reducen las oportunidades para una nueva experiencia amorosa.
2. La otra persona está igual que nosotros.
Es decir, la otra persona con la que pudiéramos coincidir tiene sus experiencias, quizá está con cierta apatía por volver a experimentar otra decepción.
Esto reduce aún más las posibilidades de encontrar a alguien compatible.
3. La historia personal pesa más si no se ha resuelto.
Tanto la historia de nosotras como la de la otra persona, tiene un papel determinante en la relación presente si no se ha trabajado.
Es decir, si no se ha madurado y aprendido del pasado, se arrastrarán problemas, esto complica aún más las relaciones amorosas.
4. Hay hijos.
Pueden ser nuestros o de ellos, pero a los 35 años, muchas personas ya llevemos con nosotros un pasado, hijos, exparejas, exesposos… Ante esto, no siempre encontramos personas dispuestas a lidiar con ello.
Eso sí, también están los que lo entienden porque lo están viviendo o los que comprenden que a veces la vida se sale del plan.
5. Lograr un compromiso es un logro.
A veces, ver el amor de lejitos es la zona más segura, de este modo, no se asume un compromiso y tampoco el trabajo emocional individual que requiere.
Pero debemos comprender algo…
No somos nuestro pasado, no somos las cosas que nos pasan, somos lo que decidimos hacer con lo que la vida nos pone ante nosotros.
Así que, si quieres tener una relación sana y generosa, primero tenla contigo. Si quieres una pareja, sal a conocer gente conociéndote a ti misma, así sabrás lo que sí y lo que no, pero serás consciente de tus decisiones.
Tener na relación amorosa a los 35 podrá ser tan difícil o fácil según tú y la persona con la que elijas compartir, lo decidan.
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