Si creías haber superado a tu ex, te tenemos malas noticias, porque aún no lo haces y estás obsesionada con él, tanto que viniste a este artículo a comprobarlo.
Con esto no queremos juzgarte o señalarte, simplemente queremos que veas que aferrarte a él no te está haciendo ningún bien.
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Porque estar obsesionada con algo no es nada sano y menos cuando se trata de una persona que no te quiere o siempre te trató mal.
Lo sabemos, pasar la página puede ser algo sumamente difícil, pero aferrarte y darle todo tu tiempo o vida a alguien que no lo merece es peor.
Por esto, es momento de que veas que no has pasado la página y que lo que sientes por tu ex no es nada bueno para ti…
Señales de que estás obsesionada con tu ex
1. Lo stalkeas constantemente.
Todos los días y a todas horas, siempre estás revisando lo que hace, con quién habla, quién lo sigue y cualquier cosa insignificante que haga en su día.
La situación empeora en el momento en el que ves algo que no te parece y enloqueces porque podría estar con alguien más o porque ya te superó.
Has dejado de vivir tu vida, para concentrarte en ser parte de la de él.
2. Lo persigues.
No solo te gusta estar al pendiente de él en redes sociales, también se te ha ocurrido que es buena idea perseguirlo a todos lados.
Por lo que te apareces en su casa, trabajo, en fiestas, reuniones con sus amigos y hasta con su familia o en citas médicas.
Quieres que él piense que es el destino, pero solo le dejas claro que estás obsesionada.
3. Le espantas el “ganado”.
No importa si ya llevan años separados, tú te creas dueña de su vida y de su corazón, por lo que siempre “marcas tu territorio”.
Ya sea dejándole mensajes tóxicos (aunque tú crees que son románticos) en donde le haces creer a las personas que aún tienen algo y que él te ama.
Sin embargo, él siempre deja claro que no es así y que está soltero.
4. Insistes.
Él ya te dijo de mil maneras que no quiere estar contigo y que lo suyo terminó hace mucho, pero tú te haces la sorda.
Siempre le estás rogando una segunda oportunidad, y aunque él ya te dio muchas, tú sigues aferrado a algo que ya quedó demostrado que no sirve.
5. Cambias para atraerlo.
Sabrás que estás obsesionada con su ex, porque te has amoldado y has buscado la forma de convertirte en su tipo ideal.
Incluso, has probado varios estilos para atraerlo hacia ti o para demostrarle que harías cualquier cosa por su amor.
No te importa perder tu dignidad en el camino, mientras él te acepte , tú seguirás buscando ganar puntos para que vuelva contigo.
6. Buscas excusas para seguir juntos.
Te has aferrado a pensar que él sigue en tu vida por cuestión del destino y que por eso debe darte una segunda oportunidad.
Le aseguras que no estás obsesionada, sino que solo le quieres hacer ver que son el uno para el otro, cuando en realidad tú estás forzando las cosas para que sigan juntos.
7. No permites que sea feliz.
Tu obsesión te ha llevado a creer que si él no está contigo tampoco puede estar con alguien más, por esto, no permites que él avance o encuentre el amor con alguien más.
Ese hombre debe sufrir como tú lo haces al no aceptar tu amor, pero no te das cuenta de que ambos merecen algo mejor.
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