A todas nos pasa: cada año renovamos nuestro propósito de bajar de peso, pero la falta de resultados rápidos nos lleva a desistir pronto.
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Y es que adaptarnos a una rutina nueva, en la que el ejercicio tenga su tiempo establecido, resulta algo más que incómodo.
Por eso, si quieres fortalecer tu fuerza de voluntad y crear un hábito de entrenamiento que te permita cumplir con lo que te prometiste a principios de año, te compartimos algunas de las más efectivas recomendaciones:
1. Relacionar el ejercicio con ideas agradables.
Es necesario eliminar el pensamiento tradicional de que «para ser bellas hay que sufrir».
La actividad física, además de tonificar los músculos y ayudarte a perder tallas, también puede ser una forma de liberar el estrés y mantenerte consciente del presente.
Lo ideal es que relaciones el ejercicio con experiencias agradables de entretenimiento, como un momento idóneo para escuchar tu música favorita o, si realizas deporte al aire libre, conocer nuevos lugares de la ciudad.
2. Establecer metas realistas.
Y es que las expectativas muy elevadas causan desmotivación cuando comenzamos a darnos cuenta que la realidad funciona a otro ritmo.
Por eso, antes de pensar en resultados rápidos, opta siempre por los reales.
Recuerda ¡sé honesta contigo misma! y mejora tu estrategia para llegar a la meta.
3. Enfocar la atención en el proceso y no en los resultados
Los pequeños errores que cometes cuando entrenas no son el enemigo, lo realmente grave es la falta de compromiso al momento de cumplir tu rutina.
Si estás comprometida, pero cometes errores, lo importante es que estás aprendiendo y creciendo a partir de ellos.
4. Dividir las metas y medir el proceso.
Esto te ayudará a motivarte y sentirte más satisfecha con cada pequeño esfuerzo que hagas.
Sé justa contigo mismo, y no te exijas en principio más de lo que tu cuerpo puede resistir.
5. Mantener la regularidad a pesar de los problemas.
Es clave no abandonar los entrenamientos a pesar de los problemas cotidianos que se presenten; al contrario, usa el entrenamiento como una forma de drenar el estrés que existe en otras áreas de tu vida.
6. Mira hacia atrás antes de mirar hacia adelante.
Concentrate en las cosas positivas que tienes y que has logrado, y comienza a usar una narrativa sobre ti misma favorable, motivadora y que orienten tus objetivos futuros.
