La flacidez vaginal no es una enfermedad; sino una condición por la que podrías pasar si tienes entre 25 y 45 años, y eres madre.
Ocurre básicamente cuando percibes una sensación de soltura en tu vagina, y esto te avergüenza en la cama con tu pareja.
Sin embargo, tal y como insisten los expertos, a pesar del cambio en su aspecto; no implica que tu salud o el funcionamiento de tu vagina esté comprometida.
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La buena noticia es que hay diversos tratamientos que pueden ayudarte a recuperar el tamaño y la forma original de tu vagina; y en Hey Hey Hello te compartimos algunos:
1. Un poco de Kegel.
Básicamente son ejercicios que ayudan a fortalecer los músculos pélvicos y de la vagina.
Puedes comenzar con dar pequeños apretones a tu vagina, con el objetivo de fortalecer los músculos de ella.
2. Más sexo.
La actividad sexual aumenta la circulación sanguínea y tonifica los músculos de tu zona íntima.
Además, durante los momentos de intimidad puedes contraer tus músculos y, además de mantenerlos en forma, le darás muchísimo placer a tu pareja.
3. Elige juguetes sexuales de un tamaño adecuado.
Recuerda que sin son muy grandes, las probabilidades de lastimarte son altas.
4. Usa lubricantes.
Si tienes problemas para humedecer tu zona íntima, habla con tu pareja, y opta por un lubricante para solventar el problema.
También podrías consultar con tu médico para descartar problemas hormonales u otros de salud.
5. Evita cargar peso.
Cuando cargas mucho peso aumenta la presión intra-abdominal, pues empujas los músculos de tu vagina hacia afuera y eso favorece la flacidez.
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