Para algunas son molestas, para otras son simples manchas. Hay quienes las consideran un símbolo de feminidad e incluso coquetas, sea cual sea la razón, sin duda a su portadora le brindan un toque distintivo.
Las pecas han causado controversia entre las mujeres durante años, pero antes de hablar sobre las extrañas obsesiones que provocan, primero te diremos por qué salen estas manchas.
•Por exposición al sol: Los melanocitos nos previenen de ser dañados por los poderosos rayos solares, UV A y UV B; pero cuando la radiación toca de cerca durante un tiempo prolongado a las células, nuestro cuerpo produce pecas, acumulando sobre la piel el pigmento de melanina.
•Por herencia: Tienden a ser heredadas genéticamente, y además son más comunes en individuos de piel clara y cabellos rubios o rojos.
No todas las personas tenemos pecas, pero a muchas mujeres les parecen un rasgo de belleza que quisieran tener, dando paso al freckling, una tendencia que busca adueñarse de esas pequeñas manchitas en la cara, aún si no las tienes de manera natural.
Para lograrlo se utilizan diversos métodos:
• Tatuajes temporales: Inició por Gabrielle Rainbow, una tatuadora cosmética de Montreal, Canadá. Se trata de tatuajes semi permanentes, que se realizan en sesiones de una hora y tienen una duración de 3 años. Con los meses se suaviza el tatuaje y logras un look muy natural. Tiene un costo de 250 dólares y debe realizarse por tatuadores expertos.
• Planillas con pecas: Si eres de las que prefieren cosas menos drásticas, existen láminas que simulan las pecas en varias gamas de colores, desde el marrón oscuro hasta el más claro. Cada pack incluye 2 plantillas para la nariz y cuatro para las mejillas. Su creación es obra de Faux Freckles y duran de 24 a 48 horas. Su precio es de 24.99 dólares y por el momento no se encuentran disponibles en México.
• Pintadas: Este sin duda es el método más tardado y el más común. Algunas profesionales utilizan varios lápices de colores diferentes para que parezcan más reales. El costo puede variar dependiendo de la marca de los lápices.
¿Te imaginabas tener miles de puntitos a tu favor?
