Nadie está exento de cometer errores y en el amor, no hay inteligencia absoluta que te libere de equivocaciones, por mucha inteligencia emocional que tengas y vivas un amor con independencia, el riesgo de arruinar la relación siempre está latente.
¿Por qué? Porque una relación amorosa se construye en terrenos de cotidianidad y espontaneidad, porque no todo está calculado y las certezas pueden desaparecer por arte de magia, además nadie puede controlar o dominar lo que el otro siente.
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Estos son los 7 errores que una mujer inteligente puede cometer en el amor.
1. Dar exceso de libertad al otro.
Una mujer inteligente desea una relación en la que tenga dependencia, el problema se presenta cuando esa libertad termina por alejar a nuestra pareja de nuestras metas y camino personal.
La idea de estar en una relación es para compartir sanamente nuestro espacio, no dejar que el espacio abra un abismo entre la pareja.
Recuerda, todo en exceso es malo.
2. Exceso de confianza.
El exceso de confianza es peligroso, la mujer que se confía en que es la única e irremplazable mejor pareja del mundo, puede descuidar la relación y por consecuencia la conexión que tiene con esa persona.
3. Dejar que el apego se manifieste.
Por otro lado, mucho amor puede hasta desvirtuar la inteligencia, lo prudente es amar bien, no amar mucho.
4. Desesperarse si sus expectativas no se cumplen.
¡Es una realidad! Una mujer inteligente está pendiente que sus expectativas se cumplan, pues el plan de vida está muy claro. Sin embargo, marca un nivel de exigencia que pareciera que la pareja debe cumplir a como dé lugar, cuando en las relaciones también se debe de CEDER.
5. No estar dispuesta a tolerar ciertos defectos del otro.
Después de algunas experiencias y desilusiones, es normal que una mujer se vuelva más precavida y difícil de conquistar, pues no está dispuesta a tolerar a otras personas.
El punto aquí es reflexionar, ¿qué tan válido es ser intolerante a ese nivel? Sí, está bien querer lo mejor para nosotras pero debemos entender que las personas son como son, no como nosotros deseamos y no encontraremos a la persona perfecta, es mejor no idealizar y ser capaces de apreciar lo que hay en otras personas tanto para bien como para mal.
6. Tener poca paciencia.
Que te digan la «mecha corta» no está padre, la paciencia es una virtud muy poderosa que debemos de cultivar para disfrutar de sus beneficios.
7. Esperar que los otros hagan lo que ella haría.
Porque desde la perspectiva de una mujer inteligente, lo que haríamos es la mejor opción y pensamos que el resto de las personas deberían de hacer lo mismo que nosotros. Gran error, ellos harán lo que puedan y quieran.
Siempre piensa en ti, por supuesto, tú eres dueña de ti y de tus emociones, pero no está mal ceder y compartir con base en el respeto, la comunicación y la reciprocidad. La salud de la relación es responsabilidad de ambos, pero tienes en tus manos la oportunidad de mantenerla a salvo.
