Hace unos meses la cantante Alicia Keys decidió dejar de usar maquillaje para manifestarse en contra de la presión que sentía por siempre verse perfecta.
Si bien esta postura de la cantante de Fallin nos parece admirable, esta presión social no sólo la sufren las cantantes, actrices y modelos, es algo que cualquiera de nosotras puede padecer y para prueba la cuenta de Instagram de Kelsie Swygart.
Esta chica planteó en recientes publicaciones que subir una foto a Instagram o conocer a alguien en la calle puede ser una oportunidad para juzgar y criticar tu apariencia.
En una de sus fotografía ella mandó a diablo a la gente a la que no le parece y critica su maquillaje definiéndolo como «demasiado» o «dramático».
Y aunque Kelsie asegura que para trabajar solo usa rímel, delineador y cejas perfectas, igual podría usar todo el maquillaje del mundo y eso no debería ser un problema para nadie.
Y aunque claramente se puede ver que Kelsie tiene pecas, ella dice que las ama lo suficiente para cubrirlas diario, por lo que no se aferra a la idea de un cutis de revista y sólo usa una base ligera de maquillaje.
Kelsie tiene muy claro que quien debe de preocuparse por su apariencia es ¡ella misma! Por lo que no le interesa lo que opinen los demás y es justo ese mensaje el que debemos quedarnos, si nos gusta maquillarnos ¡maquillémonos! Si nos gusta estar al natural ¡dejemos limpia nuestra piel! Si nos gusta un maquillaje dramático o ligero, ¡Hagámoslo!
Dejemos de preocuparnos por lo que otros piensan se ve «bien» o «mal», seamos felices al complacernos a nosotras mismas, no permitamos que juicios externos a cada una de nosotras nos hagan vivir de forma distinta a la que queremos y parte de nuestra existencia es nuestro cuerpo y lo que hacemos con él.